El papa Francisco vuelve a retomar la idea que tuvo en 2014 para que las comunidades cristianas dediquen 24 horas para el Señor en la cuaresma, más concretamente en las vísperas del IV domingo.
Ya el título de la convocatoria es sugerente:
– 24 horas: Significa un día completo, con plenitud. En fidelidad, en oblación junto al agradecimiento al Dios misericordioso.
– Para el Señor: Recoge el sentido más profundo de la oración, sin adornos ni distracciones. Una oración que en el presente año se vive a través de la Misericordia.
Nuestras comunidades cristianas, dentro de su variedad, han de recoger esta llamada que está dirigida a los pastores, a los religiosos, y a los fieles laicos. Para ello, se dan a continuación unas sugerencias o ideas que sirvan de ayuda y abran a la imaginación a la hora de la realización de esta llamada en cada situación concreta, siempre que se sepa estar con el Señor como prioridad, por encima de otras actividades personales, familiares, e incluso, si es posible, laborales. Se trata de estar con el Señor clemente y misericordioso.
La realización de esta experiencia de oración nos pone en obediencia a la Iglesia universal expresada por la llamada del papa Francisco, y a la Iglesia Diocesana, en cuyo Plan de Pastoral pide intensificar la espiritualidad y la renovación en la fe.
24 horas con el Señor es el título de esta llamada, pero habría que preguntarse: ¿dónde se encuentra el Señor para poder estar con Él?
Bien es sabido para todo cristiano los lugares en los que Él mismo ha querido quedarse:
o En la Eucaristía.
o En su Palabra.
o En el perdón sacramental.
o En los pobres y sencillos.
o En la propia historia. En ella está hasta el final de los tiempos.
o En definitiva, en su Iglesia.
Puede ser un día especial con una noche especial. ¿Difícil? Así puede parecer a primera impresión, pero no es imposible, sino necesario, porque «no sólo de pan vive el hombre…», ni de actividades, ni de tareas. Para ello habrá que hacer una buena convocatoria a todos, que incluya una motivación, una organización de actividades y distribución de tiempos, y una acogedora ambientación del templo o local.
Ahora se sirven algunas sugerencias para que cada comunidad adapte de acuerdo con sus posibilidades y así, las 24 horas para el Señor sea una experiencia vivida «en espíritu y en verdad».
Dará comienzo en la tarde del viernes día 4 de marzo, para terminar con la eucarística del sábado 5, con la celebración del IV domingo de Cuaresma.
Habrá parroquias que puedan mantener abiertos sus templos las veinticuatro horas seguidas, mientras que para otras será imposible. A estas últimas se les pediría al menos que hagan una planificación del mayor posible, siempre haciendo pública la llamada a todos.
Se trata de facilitar que todos puedan estar con el Señor, los que tienen una espiritualidad más cultivada, y los más alejados de la fe, que al menos éstos puedan estar con su Señor. También puede ser un testimonio de espiritualidad ante la «crisis espiritual que vive nuestro pueblo y ayudar a todos a mantener o a recuperar una fe viva y operante en Jesucristo Salvador», como apuntan nuestros obispos en el reciente aprobado Plan Pastoral de la Conferencia Episcopal.
AMBIENTACIÓN:
– Escoger un templo o una capilla recogidos, que inviten a la oración sin dispersión.
– Suficientemente calefactada.
– Con una iluminación centrada, pero no demasiado a oscuras para que puedan leer los participantes.
– En donde se permita la exposición del Santísimo y la proclamación de la Palabra de Dios.
– Distribución de fotocopias con algunos textos escogidos que faciliten la oración.
– Con la imagen de un Cristo crucificado con atractivo.
ACTIVIDADES:
– Rezo del Oficio Divino a ciertas horas programadas (laudes, vísperas, o alguna hora menor).
– Exposición del Santísimo.
– Propuesta del Sacramento del Perdón.
– Reflexión sobre las Obras de Misericordia (podría ser a cada hora, una breve consideración de cada una de ellas; o también, todas juntas en un solo horario).
– Distribución por horas de oración por distintas intenciones especiales.
– Llamamiento y acogida especial a grupos de jóvenes (kairós, youcat, jóvenes cofrades, scouts…) y también de niños de la catequesis, principalmente los que van a recibir este año la Primera Comunión.
– Organización de la vigilia durante toda la noche.
– Llamamiento a todos los grupos cristianos existentes en la comunidad (Adoración nocturna, cofradías, Vida Ascendente, Legión de María, Equipos de Ntra. Señora….)
– Rezo del Vía crucis.
– Y siempre, la oración del Jubileo propuesta por el papa Francisco.
PARA TERMINAR:
– Podría ser una ocasión especial para hacer por arciprestazgos una planificación coordinada:
o Que en cada hora se está orando por las vocaciones sacerdotales distribuida por las distintas parroquias del arciprestazgo….
o Que en cada hora se está orando por cada una de las parroquias….
– Podría existir un recipiente delante del altar en donde se recogieran, con la prudencia oportuna, los compromisos para este Año Jubilar que cada uno de los asistentes quisiera ofrecer a Jesucristo, después de haber participado en las 24 horas para el Señor, como expresión de renovación espiritual.
SE PUEDEN CONSULTAR MATERIALES PARA ESTA ORACIÓN EN LA PÁGINA WEB DIOCESANA, EN EL APARTADO «DOCUMENTOS DESCARGABLES»:
http://diocesisdejaen.es/materiales-diocesanos-para-la-celebracion-del-jubileo-de-la-misericordia/