Como cada año, el Obispo de Cartagena presidía la Procesión de las Palmas y la misa en la mañana de Domingo de Ramos en la Catedral. Comenzaba la celebración a las 10:00 horas, en la Plaza de la Cruz, donde, tras leer el Evangelio de Mateo –que recordaba la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén–, Mons. Lorca Planes bendijo las palmas y ramas de olivo y se inició la procesión bordeando la Catedral hasta entrar en el templo catedralicio.
Durante la homilía, el Obispo recordó que el cristiano sabe que no todo termina en la muerte: “el final de esta semana es espectacular, es glorioso porque veremos el triunfo de Cristo sobre la muerte”, dijo a los presentes animándolos a vivir intensamente estos días. Destacó además la figura del apóstol Pedro, que a pesar de negar a Jesús tres veces se convirtió en el “fundamento visible de la Iglesia”. “El Papa Francisco nos lo ha explicado bien: ‘Somos pecadores vueltos a levantar’. Nosotros sabemos que seguir a Cristo implica la cruz, pero también la gracia de la resurrección”.