El Obispo de la Diócesis de Cartagena, Mons. José Manuel Lorca Planes, presidió ayer la procesión de Las Palmas y la Misa de Domingo de Ramos en la S.I. Catedral, que estuvo concelebrada por varios sacerdotes y en la que participaron varios centenares de fieles.
A las 10:00 horas comenzó la bendición de las palmas en la plaza de la Cruz desde donde se inició la procesión hasta el interior de la S.I. Catedral.
Mons. Lorca Planes recordó la importancia de actualizar la entrada de Jesús en Jerusalén, ya que al igual que ocurre hoy, Jesús vivió este Domingo de Ramos entre las alabanzas de unos y la indiferencia de otros.
El Sr. Obispo insistió en la importancia de ser coherentes con la fe que profesamos «para que Dios se manifieste a través de nuestras palabras y gestos ante los demás, sobre todo ante los que están más alejados de la Iglesia».
El Domingo de Ramos es el inicio de la Semana de Pasión «el preanuncio de la Cruz, la victoria del bien sobre el mal», explicó el Pastor Diocesano, quien animó a los presentes a no tener miedo a hacer la voluntad de Dios y dio unas claves para ayudar a vencer este miedo: «participando activamente de los sacramentos; leyendo la Palabra de Dios detenidamente, sin prisas; siendo perseverantes en la oración; pidiendo a Dios con todas nuestras fuerzas que nos transforme; y practicando la caridad».