24 de septiembre: fiesta de Nuestra Señora de la Merced

Diócesis de Málaga
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La diócesis de Málaga es una sede episcopal dependiente de la archidiócesis de Granada, en España. Su sede es la Catedral de la Encarnación de Málaga.

El domingo 24 de septiembre se celebra la fiesta de Nuestra Señora de la Merced, patrona de las prisiones. Con este motivo, la Delegación de Pastoral Penitenciaria celebra Misa en el centro penitenciario de Alhaurín de la Torre, el 22 de septiembre, a las 10.30 horas. Fray Andrés González (trinitario) nos ayuda a profundizar en la fiesta de la Merced con el siguiente artículo:

Virgen de la Merced, patrona de las prisiones

Aún escuchamos los ecos del «Año de la Misericordia» cuando se acerca a nosotros otra nueva fiesta de la Virgen María, una más entre tantas que el mes de Septiembre celebra y vive la Iglesia por doquier: la MERCED.

Merced y misericordia van de la mano, se entrelazan para pedir perdón, para conseguir la conversión, para vivir la Paz como fruto de la verdad y de la justicia. Esto es precisamente la Virgen de la Merced para la presa y el preso de hoy. Lo ha sido para todos los presos de todos los tiempos, para los de las cárceles y para los de la sociedad llamada libre si es esclava de cualquier vicio o perversión.

Desde los inicios del siglo trece los Padres Mercedarios y los Padres Trinitarios pusieron bajo su amparo y protección, (bajo el título de La Merced unos y bajo el del Buen Remedio los otros), a cada uno de los esclavos que rescataban de las mazmorras africanas. Así lo hicieron los trinitarios P. Fray Juan Gil y Fray Antonio de la Bella cuando rescataron a Cervantes.

Hoy, la Virgen de la Merced sigue siendo «remedio» para esos hermanos y hermanas privados de libertad. También es patrona y protectora de los hermanos y hermanas que custodian y cuidan de sus hermanas y hermanos presos: los funcionarios de prisiones, la misma Institución Penitenciaria. Ella, María, que nos dio la Libertad al darnos a su hijo Jesús, sigue cuidando, protegiendo y animando a todos sus hijos para que vivan como el Padre Nuestro nos pensó y creó: libres, como hijos de un rey, como señores de si mismos, nunca como esclavos de nada y de nadie.

La Pastoral Penitenciaria de nuestra Diócesis de Málaga, querida y animada por nuestro Pastor y Obispo, Don Jesús Catalá, se hace presente en las prisiones, mediante cristianos voluntarios y sacerdotes, en nombre de la Iglesia malagueña y de Jesús; lo hace con los mismos sentimientos que Cristo tuvo con los pecadores y que el Evangelio tan bien retrata en la parábola del Hijo pródigo, de la Oveja perdida y en mil gestos y palabras de la vida de Jesús.

Ojalá que de ninguna boca cristiana salgan con indiferencia frases como «ahí estará por algo…», «tiene lo que merece…» y otros dichos, no cristianos, por el estilo. Ojalá todos miremos a las hermanas y hermanos presos con los ojos del Padre nuestro, los curemos con las manos y voz de Jesús mientras les prestamos las nuestras, los cobijemos con el abrazo de la Virgen madre de la Merced.
¡Feliz fiesta de la Madre de la Libertad!

Encarni Llamas Fortes

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