En la mañana del Miércoles Santo, un grupo de adolescentes de la Parroquia de la Asunción de Ntra. Sra. de Villargordo, acompañados de su párroco, D. Antonio Blanca y unas catequistas han visitado la casa de las Hermanitas de los Pobres, para conocer su vocación y la misión tan bella de atender y cuidar a nuestros mayores.
En vísperas de comenzar el Triduo Pascual, y con motivo del día del Amor Fraterno, se encuadró esta actividad para que los más jóvenes puedan empatizar y conocer esta realidad, asumiendo valores como el respeto y adquiriendo actitudes como la ternura y la cercanía, y, sobre todo, haciéndoles ver que la vocación a la que están llamados y que tendrán que ir descubriendo busca sobre todo la felicidad del prójimo. Ayudar y hacer feliz a los demás debería ser el lema de nuestra vida y nuestro proyecto personal de vida.
Los adolescentes han compartido parte de la mañana con las hermanitas y con los ancianos participando en la Eucaristía, en la procesión por el patio de la residencia y ayudando en la atención y servicio del almuerzo.
Terminábamos nuestro encuentro ante la imagen de San José, invocando su amparo y protección de todo el pueblo de Villargordo y, sobre todo, pidiéndole por las vocaciones tan necesarias en nuestra Iglesia. Una de las hermanitas nos contaba que siempre que se les presenta alguna necesidad se lo piden a San José, por ello, hemos dejado el nombre de nuestro pueblo a los pies del Patrón de la Iglesia Universal, para que con su intercesión poderosa, sean muchos los jóvenes que descubran su vocación.
Comunidad parroquial de Villargordo
