Francisco González de Aledo Burgo pregonó, la noche de este jueves, la Semana Santa de la ciudad de La Laguna. Aledo quiso compartir «lo poco que sé de la Semana Santa y algo de mis vivencias y sentimientos».
La lectura del pregón se desarrolló en la parroquia matriz de Nuestra Señora de La Concepción. En el templo se encontraban, entre otros, el obispo nivariense, Bernardo Álvarez, el alcalde de Aguere, Fernando Clavijo, el delegado episcopal para las Hermandades y Cofradías de la ciudad, Jorge Fernández, el presidente de la Junta de Hermandades y Cofradías de La Laguna, Pedro López, y su Comité Ejecutivo.
El pregonero relató las resistencias que tuvo para aceptar este encargo, así como la «multitud de recuerdos, de entrañables vivencias y, sobre todo, me acorde de personas queridas que vivieron profundamente y con auténtico sentido cristiano nuestra Semana Santa». No en vano González de Aledo apuntó algunos trazos de cómo conoció y vivió la Semana Santa lagunera, «con más de cincuenta años de travesía».
Posteriormente, su disertación se detuvo unos minutos para «repasar la evolución de la Semana Santa que yo he vivido y sobre el verdadero sentido de la misma»- apuntó. «La Semana Santa de La Laguna es considerada como un auténtico museo al aire libre» – dijo. Rindió, por otro lado, un sincero homenaje a cuantos siguen haciendo posible que ésta se viva intensamente «además de en los templos, también en las calles».
No faltaron a lo largo de su intervención algunas citas al magisterio del papa Francisco en referencia a las Hermandades y Cofradías, que son un tesoro de la Iglesia y algunos aspectos de la piedad popular.
A renglón seguido el pregonero valoró el papel destacable que estas asociaciones de fieles han tenido en el esplendor de la Semana Santa de la ciudad. Igualmente invitó a la reflexión y a la autocrítica que centró en algunas deficiencias en la comunión eclesial, la mejora de la acción socio-caritativa y, una tercera faceta que denominó, «evangelizar con la palabra».
«Lo que entendemos como piedad popular no debe ser ignorada, ni tratada con indiferencia o desprecio desde ningún sitio, pues como afirma nuestro querido Papa Francisco es una manifestación importante, es un tesoro que tiene la Iglesia, pero también añade algo importante: No nos conformemos con una vida cristiana mediocre, sino que nuestra pertenencia sea un verdadero estimulo. Por tanto, miremos en nuestro interior, seamos sinceros con nosotros mismos y llegaremos a la conclusión de que algo más se puede hacer»- aseveró.
En la parte final de su intervención, Francisco González de Aledo recordó e hizo una reflexión ante el sufrimiento y pasión, igual que Cristo, que están hoy en pleno siglo XXI padeciendo millones de cristianos».
Se acerca la Semana Santa, «estamos un año más invitados a vivirla con intensidad y ardor, pero también con coherencia cristiana, tratando de encontrar razones para la vida y la esperanza»- invitó a los presentes.
El pregonero finalizó su disertación con una llamada a la alegría. «La búsqueda de la alegría por el hombre está tan arraigada en su corazón como la búsqueda de sentido a la propia existencia. Alegraos los que no tenéis complejos para expresar vuestra fe, con el ejemplo de vuestra vida, en la sociedad, en el trabajo, en la familia. El creyó que merecía la pena entregarse por cada uno de nosotros, y lo hizo por amor».
«La próxima Semana Santa demos gracias al Señor por ser unos privilegiados viviendo esa gran fiesta que El mismo nos regaló. La fe, la devoción y la emoción manifestadas de la forma más bella posible en el marco de esta Ciudad única- señaló.
Por otro lado, la presentación del acto corrió a cargo de la periodista Patricia Santana. En la parte musical participaron la Banda de Música San Sebastián de Tejina y la violonchelista Silvia Díaz Parrilla que interpretaron la obra «Semana Santa de Aguere». Una composición de Agustín Ramos para la Semana Santa de La Laguna. También actuó la Camerata Lacunensis. El obispo intervino para cerrar el acto.