Querido hermano en el Episcopado, Monseñor Julián Barrio Barrio:
Ante la tragedia ocurrida en Santiago de Compostela, que ha supuesto la muerte de decenas de personas y de otros muchos heridos, quiero expresarte, junto con el clero y fieles de esa diócesis, nuestra condolencia y solidaridad con los afectados y sus familias, con la Diócesis Compostelana y con todo el pueblo gallego, por las consecuencias de este desgraciado y terrible accidente.
Al mismo tiempo elevamos a Dios nuestra oración por los fallecidos y sus familiares, así como por todos los heridos, suplicando a Dios por su pronta recuperación.
Les tendremos a todos muy presentes hoy en la celebración de la Santa Misa, que aquí en Tenerife tiene especial relevancia, porque la capital de la Provincia venera a Santiago como su Santo Patrón.
Te agradezco que, en la medida de lo posible, transmitas estos sentimientos a los familiares de las víctimas, a la comunidad cristiana y a las autoridades.
Un fuerte abrazo en Cristo, Señor de la vida y de la muerte.
Bernardo Álvarez Afonso
Obispo Nivariense