“Vuela alto. Sueña grande”, fue el lema de una iniciativa desarrollada este sábado en el seminario. Una propuesta destinada a escuchar y dialogar con los más jóvenes en el marco del proceso de reflexión que la Iglesia está realizando previo al venidero Sínodo sobre “los jóvenes, la fe y el discernimiento”.
Además, esta propuesta iniciativa que los participantes dieran su opinión sobre algunas cuestiones de cara a la mejor atención pastoral de este sector.
La jornada comenzó con la acogida, un momento de oración y una breve presentación del camino recorrido hasta hoy en relación al venidero Sínodo, a partir de lo que han ido respondiendo y sugiriendo los jóvenes.
Posteriormente se realizó un trabajo destinado a crear un “mapa visual” sobre dos cuestiones: ¿Cómo ven los jóvenes a la Iglesia y cómo ve la Iglesia a los jóvenes?
Un momento musical a cargo de Alejandro Abrante fue el prólogo de una creativa puesta en común. El almuerzo compartido dio paso a un segundo trabajo centrado en #presinodo hashtag en Twitter”. Se trataba de realizar unas propuestas de futuro, desde ciertas imágenes que sirvieran para concretar los elementos importantes que una pastoral con jóvenes tendría que tomar en consideración.
La jornada finalizó con un tiempo de oración en la capilla del seminario. A los participantes se les entregó de un símbolo que recordara y sintetizara lo vivido.
Los miembros laicos de la delegación de Nueva Evangelización llevaron adelante la implementación de este espacio de diálogo y escucha. El obispo, Bernardo Álvarez, les acompañó durante la jornada, teniendo algunas intervenciones. Además, estuvieron presentes el vicario general, Antonio Pérez, el nuevo delegado de pastoral juvenil-vocacional, David Rodríguez y el delegado para la promoción de la nueva evangelización, Eduardo Rodríguez.