En el nuevo curso.
Saludo fraterno.
Hemos comenzado un nuevo curso. El mes de septiembre es un tiempo favorable para orar, estudiar, programar, en esta ocasión, no sólo este curso, sino el cuatrienio en comunión con el PDP.
Ya les he indicado que vayamos pidiendo el material que precisemos del PDP. Igualmente les llegará un ejemplar del Plan y del tríptico informativo por correo ordinario. Además, por este medio les envío ahora la actualización del calendario pastoral y la guía para el estudio de la Carta Pastoral del Obispo y para la concreción del PDP en parroquias, arciprestazgos, delegaciones, etc. Todos estos materiales ya se pueden bajar de la web: obispadodetenerife.es
Ha sido estupendo ver cómo diversos equipos presbiterales de los arciprestazgos ya se han ido reuniendo estos días para perfilar los venideros años. ¡Felicidades! En relación a este tema los vicarios episcopales concretarán la reunión de presentación del Plan a los miembros de los consejos de pastoral y a todos los agentes de pastoral de cada arciprestazgo. Mi intención es que este proceso esté culminado a finales de septiembre por lo que ruego tanto a vicarios como a arciprestes que concreten a esta vicaría cuanto antes fecha, lugar y hora. El Obispo hará otro tanto en las reuniones de cada vicaría, cuyo calendario ya tenemos.
Una última cosa que estimo muy importante a la hora de programar. Tanto en los equipos presbiterales, como en los consejos arciprestales u otros ámbitos, es IMPRESCINDIBLE, si queremos tener reuniones fructíferas, que los responsables de cada ámbito o lugar presenten un anteproyecto de programación pastoral cuatrienal que en cada reunión se mejore, enmiende, enriquezca, etc. Sin este trabajo previo una reunión de poco más de una hora es casi estéril.
La Nueva Evangelización, en cuya órbita nos sitúa el PDP. nos pide una conversión personal y pastoral, concretamente, según los lineamenta del venidero Sínodo, demanda de cada uno y de todos: un esfuerzo de renovación para estar a la altura de los desafíos de este tiempo nuevo, la promoción de la revitalización de la Iglesia, poner en el centro a Jesucristo y abrir caminos nuevos capaces de proponer el evangelio a las nuevas culturas.
Un programa apasionante. Una muestra grande de confianza de Dios. Una llamada que pide lo mejor de cada uno y de todas las comunidades.
Oremus ad invicem. Gracias mil. ¡A evangelizar!
Fraternalmente.
Antonio Manuel Pérez Morales
Vicario General
San Cristóbal de La Laguna, a 6 de septiembre de 2011
