
Previo a la Celebración Jubilar del Apostolado Seglar y de las Familias, se comenzó la jornada con el ya tradicional encuentro de movimientos y asociaciones que cada año se convoca en las vísperas de la solemnidad de Pentecostés. Este año presididos por nuestro Vicario de Pastoral, D. Francisco Rosales, que inició la mañana con una reflexión,a partir de la profecía de Ezequiel, haciendo hincapié en que son muchos los destierros en los que hoy se puede vivir, aquel vivir sin tierra, sin vida propia, sin destino que nos relata el profeta del antiguo testamento, hoy lo podemos traducir al lenguaje de nuestro tiempo; paro, violencia, refugiados, fracasos matrimoniales y familiares, valores en crisis… “¿Dónde encontrar consuelo, sanación, misericordia? Desde la intimidad con Dios; desde esa intimidad en la que nos podemos sentir pueblo suyo, pueblo renovado con la fuerza de su Espíritu, para hacer posible lo que pudiera parecer imposible”. Y a eso estamos convocados en esta jornada, concluía D. Francisco, a vivir una mayor y gozosa intimidad con Dios que nos permita ser testigos de su Misericordia. Deseando a todos los movimientos y asociaciones presentes una jornada provechosa, especialmente al nutrido grupo de personas pertenecientes a la pastoral del Sordo, recientemente nacida en nuestra diócesis pero que ya da sus primeros pasos firmes y seguros.