La Catedral de Sevilla acogerá el próximo domingo 12 de mayo, a las ocho de la tarde, la ceremonia de admisión a las Sagradas Órdenes de ocho seminaristas, en una Eucaristía presidida por monseñor Ramón Valdivia, obispo auxiliar de Sevilla.
Con este rito, requisito indispensable previo a la ordenación sacerdotal, la Iglesia reconoce la vocación al sacerdocio de los admitidos a órdenes, es decir, que el propósito de los aspirantes “ha alcanzado un grado suficiente de madurez”. Por ello, éste ha de ser manifestado públicamente por el aspirante, tras lo que el Obispo, habiendo escuchado el parecer de quienes lo conocen, debe aceptarlo.
Los candidatos son: Alberto Jesús Campos Torres, Manuel Carrasco García-Moreno, Javier Llorente Gutiérrez, Ángel López Olivero, Teodomiro Ortega Fernández, Lukas Pysz y Sujith Vidhyadharan Pillai Sujatha, del quinto curso del Seminario Metropolitano de Sevilla; y Andrés Urtasun Biurrun del Seminario Redemptoris Mater.
María de Nazaret aparece poco en los textos de los Evangelios, pero su presencia permite que puedan desarrollarse reflexiones y meditaciones sobre las virtudes que adornaron a esta mujer, que es el espejo donde debemos mirarnos todos los cristianos.
Alejandro Fernández Barrajón nos destaca algunos de los aspectos que caracterizaron la vida de la Madre de Dios, y que son nuestro referente para vivir en cristiano.
Ella es nuestro modelo a imitar en el día a día. Y es que María debe iluminar siempre nuestra realidad cotidiana, en las luces y en las sombras, como bien nos hace ver el autor.
Fuente: Editorial Paulinas.
La Hermana Pilar González, desde la céntrica librería Welba, nos realiza el comentario literario sobre este libro en El Espejo de COPE Huelva.
La tarde de ayer se celebró en el aula Antonio Domínguez Valverde del Arzobispado de Sevilla el acto de presentación del libro ‘El laico en el camino de la sinodalidad’ (editorial Montecarmelo, 2024), que recoge la tesis doctoral defendida por el sacerdote Marco Antonio Rubio, sobre el Sínodo de Sevilla celebrado en 1973. Con aquella cita, la Archidiócesis de Sevilla se convirtió en la primera diócesis del mundo que se paraba a reflexionar sobre la aplicación del Concilio Vaticano II que se clausuró poco antes.
El acto contó con la intervención del arzobispo, monseñor José Ángel Saiz, que destacó cómo, “al contrario de lo que sucede con muchas tesis doctorales muy bien escritas y documentadas pero que no lee nadie, este libro podrá ayudar tanto a nivel académico como pastoral y eclesial”. Monseñor Saiz recordó numerosas referencias del papa Francisco en el contexto del actual Sínodo de la Sinodalidad, y enumeró algunos de los frutos de aquel sínodo del 73 que se perciben en el momento actual de la Iglesia diocesana. “Ese sínodo ya apuntaba las reformas en el modo de proceder que ahora señalan los acontecimientos actuales”, añadió.
Finalmente, señaló que “a todo lector que se acerque a esta obra le será fácil comprender el papel del laico en la vida de la Iglesia”. Hoy asistimos a un “máximo protagonismo de los laicos”.
Por su parte, el autor del libro recuerda que en el evento de 1973 “se tomó conciencia de la importancia del laico en la Iglesia”. “Hay una relación clara entre el Concilio Vaticano II, el Sínodo Hispalense de 1973 y este Sínodo de la Sinodalidad”, añadió. Además, y en esta línea, afirmó que ahora que se está viviendo esta fase final del Sínodo de la Sinodalidad “vemos la experiencia del Sínodo del 73 como algo iluminador para nosotros”.
También intervino en el acto el profesor Miguel Ángel Núñez, que subrayó que este libro “cumple con una deuda que teníamos en el ámbito teológico, porque el Sínodo de 1973 ha llamado más la atención en el mundo civil que en el eclesiástico. Más en el ámbito del Derecho que en el de la reflexión teológica”. A la pregunta de qué aporta este trabajo, Núñez señaló que “todo cuanto supuso el sínodo, viene a realizar una determinada sensibilidad teológica, nueva, que procedía del recién clausurado Concilio Vaticano II, donde el cardenal Bueno Monreal estuvo presente”.
Cerró el acto el decano de la Facultad de teología, Manuel Palma, que subrayó la importancia de este acto, ya que “una tesis no culmina con la defensa ante un tribunal, sino con la publicación del texto, donde se recoge el fruto de ese camino de búsqueda e investigación”. “Por tanto -añadió- este es un momento de in mensa alegría. Palma concluyó con un homenaje expreso a la figura de quien fuera secretario general del Sínodo Hispalense de 1973, el sacerdote Antonio Hiraldo, “quien tanto nos impulsó a leer los resultados de este sínodo, y a vivirlos en el hoy de nuestra propia Iglesia”.
Entre los asistentes al acto se encontraba la letrada e investigadora Lourdes Sivianes, que recientemente presentó el libro ‘El Sínodo de Sevilla de 1973‘ que recoge la tesis doctoral que defendió sobre este evento eclesial celebrado en la Archidiócesis durante el episcopado del cardenasl Bueno Monreal.
La comunidad eclesiástica de Huelva se ha reunido este viernes, 10 de mayo, para celebrar la festividad de San Juan de Ávila, patrón del clero español. Los actos conmemorativos, organizados por la Delegación Diocesana para el Clero, han tenido lugar en la localidad de Aracena, iniciando con un solemne momento de adoración ante el Santísimo Sacramento. Este ha incluido el rezo de la Hora Intermedia de Sexta y una reflexión guiada por el delegado diocesano para el clero, Andrés Vázquez, quien ha inspirado a los presentes con citas del mismo San Juan de Ávila. “Y ofreciéndote a sí , de esta manera, haces al Señor más señalados servicios en esto que si mil mundos le dieses… Él mismo se ofrece a Dios en recompenso de que el mismo Dios se da a Él” (Sermón 43, 677) fue una de las reflexiones a las que hizo referencia el delegado.
En un acto de reconocimiento, tres destacados miembros del clero han sido homenajeados por sus veinticinco años de servicio:
Antonio Lucena Cerero, nacido en Trigueros en 1965, fue ordenado presbítero en Córdoba, el 20 de marzo de 1999, hace ahora veinticinco años, cuando todavía era Carmelita Descalzo, Orden a la que perteneció antes de incorporarse a nuestra diócesis, en la que se incardinó en 2011.
Antonio ha tenido varios encargos pastorales desde su ordenación, aparte de los que tuvo en la Orden del Carmen, tanto en España como en Argentina, en nuestra diócesis ha tenido los siguientes:
Vicario Parroquial de Ntra. Sra. del Carmen, de Punta Umbría.
Vicario Parroquial de Sta. María del Mar, de Punta Umbría.
Párroco de Cumbres Mayores, donde fue el fundador del Monasterio de la Divina Misericordia y San José, de Carmelitas Descalzas.
Administrador Parroquial de Cumbres de Enmedio.
Administrador Parroquial de Hinojales.
Miembro del Patronado de Cumbres Mayores.
Administrador Parroquial de Cañaveral de León.
Párroco de Campofrío.
Párroco de El Campillo.
Párroco de La Dehesa de Riotinto.
Párroco de La Granada de Riotinto.
Su cargos actuales son los siguientes:
Párroco de Alosno, Villanueva de las Cruces y Montes de San Benito.
Arcipreste del Andévalo.
Miembro del Consejo de Presbiterio.
Martín José García Ramírez, nacido en La Palma del Condado en 1968, se ordenó presbítero en la Archidiócesis de Toledo, hace ahora veinticinco años, el 19 de diciembre de 1999. Ejerció cargos pastorales en dicha diócesis y, posteriormente, fue incardinado en la diócesis de Cádiz y Ceuta, hasta que vino a la diócesis de Huelva en 2010. Desde entonces ha ejercido los siguientes cargos:
Párroco de Higuera de la Sierra.
Administrador Parroquial de Puerto Moral.
Administrador Parroquial de La Umbría.
Administrador Parroquial de Valdezufre.
Párroco de La Granada de Riotinto.
Capellán del Hospital Juan Ramón Jiménez.
Actualmente está Adscrito a la Parroquia de La Palma del Condado y es Capellán de las Carmelitas de la Caridad de Vedruna. Recientemente ha sido incardinado en nuestra Diócesis de Huelva.
Gregorio Mora Mora, nacido en Beas en 1956, es profesor y fue ordenado como Diácono Permanente hace también veinticinco años, concretamente el 7 de febrero de 1999 en Beas. Está casado con Dª. María Rosa Waflar Ramírez y es Diácono Colaborador de la Parroquia de San José, de Candón (Beas).
Cada uno de ellos ha recibido una escultura del Buen Pastor, obra del reconocido escultor palmerino Martín Lagares, como muestra de gratitud y reconocimiento a su dedicada labor.
El evento ha concluido con las conmovedoras palabras del obispo, Mons. Santiago Gómez Sierra, quien ha resaltado la importancia del servicio y la devoción de estos hombres a la iglesia y a la comunidad.
Este día especial no solo ha servido para honrar la memoria de San Juan de Ávila, sino también para celebrar el compromiso continuo y la fe de aquellos que guían espiritualmente a la Diócesis de Huelva.
El domingo 12 de mayo, solemnidad de la Ascensión del Señor, se celebra la 58ºJornada Mundial de las Comunicaciones Sociales. «Inteligencia artificial y sabiduría del corazón: para una comunicación plenamente humana» es el tema que propone el Santo Padre para la Jornada de este año. Ese mismo día, se celebrará en la ermita de Ntra. Sra. de los Ángeles, dentro del Cerro, en Getafe, una eucaristía que conmemora esta jornada mundial presidida por Mons. Ginés García Beltrán, obispo de Getafe, retransmitida por la 2 de TVE.
Por su parte, la Santa Sede hizo público el pasado mes de enero, el Mensaje del papa Francisco para la 58º Jornada Mundial de la Comunicaciones Sociales en el que destaca cómo la inteligencia artificial está modificando radicalmente la información y la comunicación. El pontífice plantea si la inteligencia artificial acabará construyendo «nuevas castas basadas en el dominio de la información» o si, por el contrario, traerá «más igualdad promoviendo una información correcta».
¿Cuál es el mensaje de los obispos? En el foco: la inteligencia artificial
Los obispos de la Comisión Episcopal para las comunicaciones sociales también han escrito un mensaje con motivo de esta Jornada Mundial . En el texto invitan a reflexionar sobre una revolución de calado: la de la inteligencia artificial. Por un lado, en lo que atañe a la dignidad humana, ya que, afecta a las personas y debe tener al ser humano y su dignidad en el centro. Por otro, sobre su repercusión en el ámbito de la comunicación. Un campo, en el que puede ser una oportunidad pero también un riesgo.
Los obispos inciden en poner al ser humano en el centro de la comunicación: «la inteligencia artificial debe de ser liberada de sesgos ideológicos, políticos, de eficiencia económica, que expulsan al ser humano del centro de la actividad de comunicación», aseguran.
En este sentido, destacan: «El sesgo de humanidad es el único indispensable en una inteligencia artificial socialmente responsable, al servicio de la dignidad del hombre y de nuestro tiempo».
Los obispos, antes de finalizar su mensaje, también señalan que «toda comunicación es, de manera especial en ese tiempo, uno de los elementos claves para la fortaleza de las democracias. Por eso, es preciso proteger este derecho constitucional a comunicar o recibir libremente información veraz por cualquier medio de difusión, de los poderes económicos y políticos, que tantas veces desean limitarlo».
Cáritas Española ha abierto una campaña de emergencia para llevar ayuda humanitaria a Haití, el país más pobre y desigual de América con una población cercana a 12 millones de personas. La inseguridad alimentaria, la violencia de las bandas armadas, la vulneración generalizada de los derechos humanos y los brotes de enfermedades ligadas a la falta de agua y saneamiento están llevando a la población al borde del colapso.
Desde hace meses, las bandas criminales controlan buena parte del territorio, principalmente el área metropolitana de la capital, Puerto Príncipe. Según Naciones Unidas, más de 362.000 personas se han visto obligadas a salir de la ciudad hacia otras regiones dejando atrás sus medios de vida y enfrentándose a situaciones de mayor vulnerabilidad. El 72 por ciento de la población sufre malnutrición, mientras que 4,97 millones de haitianos están al borde de la hambruna.
“Esta aceleración de los ataques armados limita la circulación de mercancías y contribuye al aumento de los precios de los alimentos básicos, que entre enero y abril han subido un 21%”, explica Juan Manuel Díaz, cooperante de Cáritas Española en el Caribe y Centroamérica.
Cierre de hospitales y escuelas
La violencia ejercida por las bandas armadas ha provocado el cierre de decenas de hospitales y centros de salud por la falta de medicamentos y personal. Además, más de un millar de escuelas permanecen cerradas y los menores se han convertido en el blanco de los reclutamientos de las organizaciones criminales. “La situación de violencia e inseguridad alimentaria sumada a la falta de apoyo psicosocial está afectando la salud mental de la población, todo el mundo tiene miedo”, indica Juan Manuel Díaz.
La red haitiana de Cáritas diocesanas informa de la llegada de decenas de miles de desplazados en las provincias, que han aumentado la demanda de productos y servicios en poblaciones donde ya había grandes carencias.
Con la campaña “Cáritas con Haití”, la Confederación pretende canalizar la solidaridad de los donantes españoles tras la llamada de emergencia de las Cáritas haitianas. Cáritas Española aportará 100.000 euros para este apoyo inicial de emergencia, que será destinado sobre todo a las personas desplazadas en Hinche (centro-este) y Fort Liberté (norte). El objetivo es prestar apoyo psicosocial, ayuda a la producción agrícola y material de primera necesidad, como kits de alimentos, higiene, material escolar, mantas y tiendas.
“En Cáritas Española estamos apoyando a las Cáritas diocesanas que están atendiendo a esa avalancha de desplazados de la capital. Agradecemos todo el apoyo que nos puedan ofrecer para poder atender esta emergencia humanitaria que podría ir a peor porque empieza la temporada de lluvias, y estamos esperando la intervención militar de la ONU en pocas semanas que traerá más violencia.”, asegura Juan Manuel Díaz.
El drama de los 362.000 desplazados internos es que el 60% ya vivían fuera de sus hogares debido a la falta de medios de vida. “Lo que está fomentando la red de Cáritas parroquiales son las familias de acogida. La idea no es montar campos de desplazados sino ayudar a las familias que están acogiendo a sus familiares que huyen de la capital”, señala.Las Cáritas haitianas, que llegan a todo el territorio nacional, se coordinan con las autoridades locales para asegurar que la ayuda llega a las personas que más lo necesitan. Además, tienen identificados proveedores de suministros locales que le permiten recibirlos sin tener que pasar por las zonas controladas por las bandas.
Cáritas Española es de las pocas Cáritas que tiene una presencia consolidada en el país a través de las Cáritas diocesanas. Desde 1998, ha mantenido su apoyo y compromiso con el pueblo haitiano, especialmente tras el terremoto que asoló el país el 12 de enero de 2010, el huracán Matthew en 2016, y del terremoto de agosto de 2021.
Desde entonces, la Confederación mantiene un apoyo continuado en proyectos de saneamiento, desarrollo agropecuario y de ganadería y grupos de auto-ahorro, que permiten a los haitianos mejorar su autonomía. “Hasta ahora cuando necesitábamos dinero, teníamos que conseguirlo con alto interés, y ahora en el grupo ahorramos y nos prestamos a nosotros mismos, con un interés mucho más bajo. Aun con préstamos de 100 gourdes (1 euro) nosotros avanzamos mucho”, explica Silva George (en la imagen), participante de un programa de auto-ahorro.
En esta fiesta de San Juan de Ávila, patrón del Clero español, el Obispo de Jaén, Don Sebastián Chico Martínez, ha presentado ante los Medios de Comunicación de la provincia el Año Jubilar 2025, “Peregrinos de la esperanza”, después de que ayer el Papa Francisco promulgara la Bula de este año santo.
El Prelado jiennense ha comenzado su intervención explicando que nuestra sociedad necesita “esperanza”: “En este tiempo tan convulso, con tantos conflictos, con tanto desanimo, con inestabilidad en todos los ámbitos, los cristianos nos sentimos interpelados por la Iglesia para ser esperanza en medio de la sociedad”
En este sentido, Monseñor Chico Martínez ha querido señalar que el Jubileo, en el que se conmemora el 2025 aniversario de la Encarnación del Hijo de Dios, es un tiempo santo para los cristianos, pero que la universalidad de la Iglesia ha querido proyectar esa esperanza en toda la humanidad.
De este modo, y en alusión a la Bula pontificia hecha pública ayer por el Papa Francisco ha resaltado “el sueño de Francisco”, con el que ha querido que esa esperanza se viva en todos los ámbitos de la sociedad universal, con especial atención a los pobres, a los presos, a los ancianos, a los jóvenes… “El Papa Francisco es tremendamente ambicioso en este año y confía en el compromiso de los cristianos en particular y de las naciones, de los poderosos, para hacer un mundo más justo, igualitario, sin hambre, sin pobreza, sin desempleo y en paz… que nazca del compromiso con el prójimo”, ha manifestado Don Sebastián, a la vez que ha añadido: “Algunos signos de esperanza que detalla el Santo Padre en la Bula del Jubileo son la paz para el mundo, la apertura a la vida. De una manera particular pone a los pobres en el centro. Lo hace apostando por un fondo mundial para acabar con el hambre o condonar la deuda de los países más pobres”.
Antes de dar paso a la intervención de D. Bartolomé López Gutiérrez, como Delegado diocesano del Clero, el Obispo de Jaén ha querido insistir en que este tiempo de gracia, que quiere ser reflejado en todos los ámbitos de la sociedad, pasa por un cuidado de los espiritual que lleve a los cristianos a un encuentro personal con el Señor “y que sea una vivencia que se contagie. Porque los cristianos estamos convencidos de que es a través del testimonio como otros pueden llegar a conocer a Jesús, pueden encontrarse con Él y cambiar su vida”.
Un año de júbilo y esperanza
La bula promulgada ayer por el Santo Padre hace referencia, entre otros asuntos, a las fechas en las que se desarrollará el Jubileo. En el ámbito diocesano, el Obispo abrirá la Puerta Santa de la Catedral de Jaén, templo Jubilar de la Iglesia de Jaén, el próximo 29 de diciembre de 2024, domingo de la Sagrada Familia. Y se cerrará el 28 de diciembre del 25, con otra solemne Eucaristía de acción de gracias por los frutos jubilares.
Entre esas dos fechas se desarrollarán actos y cultos en los que la Iglesia de Jaén se pondrá en diálogo con la sociedad de Jaén a través de los cultos, de la cultura con exposiciones y conciertos y por supuesto con la caridad.
Hasta el Templo de Vandelvira peregrinarán todas aquellas personas que quieran alcanzar la gracia jubilar. Podrán hacerlo por parroquias, por movimientos, por asociaciones… Aunque se han previsto ya cinco peregrinaciones por Vicarías de zona coincidiendo con los domingos de Cuaresma. “Serán peregrinaciones que nos unirán más a nuestra tierra, a nuestra comarca”.
Del mismo modo, el Delegado para el Jubileo ha expresado que, “tendremos presentes a todas las realidades de nuestra vida: catequistas, seminario, sacerdotes, religiosas… Pero, también, de nuestra vida cotidiana, de ahí el deseo de celebrar el jubileo del deporte, o el jubileo de los agricultores, nuestra tierra vive principalmente del campo, y seguro que nos ayudará a ver el valorar la creación”.
También, se ha recordado que el Jubileo de las Cofradías será el 4 de octubre, con un “Rosario de esperanza” en el que participarán 20 imágenes representativas del fervor de los jiennenses y llegadas desde todos los puntos geográficos de la Diócesis, a las que se unen Ntra. Sra. del Rosario, Patrona de Segura de la Sierra; y se ubicará en la Puerta del Perdón de la Catedral, San Eufrasio de Andújar, como patrón de la Diócesis y que acompañará en este lugar privilegiado a la Joya que envuelve nuestro gran templo Catedralicio, el Santo Rostro.
La Caridad como esperanza
Este año Jubilar, además, tendrá un proyecto de Caridad que se vertebrará a través de Cáritas española, se trata de distintas acciones dirigidas a dignificar la vida de mujeres víctima de la trata, así como de los migrantes. “Será Caritas española, en coordinación con las Cáritas diocesanas quien pongan en marcha proyectos concretos, para estos colectivos. El Papa subrayó ayer que el jubileo, cobra su pleno sentido si de verdad tenemos gestos, signos de esperanza con más desfavorecidos”, ha señalado el Delegado del Jubileo en su intervención.
Diálogo con la Cultura
Entre los actos de carácter cultural que se van a poner en marcha se ha anunciado que The Mystery Man se expondrá en la Catedral, en su versión más completa, entre los meses de marzo y junio.
Además, la Catedral, también acogerá una exposición sobre el 1700 aniversario del Concilio de Nicea o el concierto del Miserere de Baeza.
En definitiva, como ha aseverado el Prelado jiennense “que este año que con tanto cariño estamos preparando no sea un año más, queremos llenar de esperanza el corazón de los jiennenses. Queremos que dé frutos espirituales y en definitiva que ese júbilo que para los cristianos supone saberse amados por Dios, seamos capaces de trasladarlo a tantas personas que, en muchas ocasiones, sin saberlo, están sedientas del amor de Dios”.
Hoy, 10 de mayo, a partir de las dos menos veinticinco de la tarde, Leonardo Sánchez tendrá un invitado de honor en el programa El Espejo de la Iglesia: el obispo auxiliar de Sevilla, monseñor Ramón Valdivia, con quién disertará sobre su primer año de episcopado y, especialmente, se detendrá en su relación con el clero sevillano con motivo de la celebración ayer de la festividad de San Juan de Ávila.
Por otro lado, en la sección de ‘La Giraldilla’, a cargo de Isidro González, se anunciará las novedades para el Jubileo 2025 convocado por el Papa Francisco.
Podrá escucharlo hoy en COPE 99.6 a partir de las dos menos veinticinco de la tarde, o en una redifusión a las tres y media en COPE MAS (105.8 FM).
El próximo domingo, 12 de mayo, Solemnidad de la Ascensión del Señor, la Iglesia celebra la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales. Por este motivo, el Obispo de Jaén, Don Sebastián Chico Martínez, se ha reunido para desayunar, esta mañana, con directores y periodistas de los medios de comunicación de toda la provincia.
Una veintena de profesionales de medios impresos y audiovisuales, así como el Vicario General y el Provicario General, se han reunido, en torno a una taza de café, para disfrutar de un encuentro cercano y distendido.
Don Sebastián, haciendo referencia al mensaje del Papa Francisco para esta 58º Jornada Mundial de la Comunicaciones Sociales, que lleva como lema «Inteligencia artificial y sabiduría del corazón: para una comunicación plenamente humana», ha querido explicar que en este tiempo en el que la Inteligencia Artificial se abre paso en las redacciones de los Medios de Comunicación, “nos encontramos ante un nuevo desafío de dimensiones aún desconocidas”. Sin embargo, con la esperanza de que la IA sea una herramienta que agrande el horizonte informativo ha querido animarlos a “humanizar la información, porque todo lo que se pasa por el corazón cobra vida y llega más fácilmente a vuestros receptores: lectores, oyentes, internautas, espectadores”. En este sentido, Don Sebastián ha querido felicitarlos y subrayar la responsabilidad de los medios de comunicación de transmitir una información veraz y llena de esperanza para la sociedad.
Además, el Obispo ha hecho hincapié en la importancia de las buenas relaciones entre la Delegación de Medios del Obispado y los medios de la provincia, reiterando que la Iglesia de Jaén está al servicio de toda la sociedad, en general, y de los medios de comunicación, en particular.
Durante su diálogo, con los medios, Monseñor Chico Martínez los ha invitado, personalmente, a participar en las «I Jornadas de Comunicación Beato Lolo: Comunicador de la verdad», que se van a celebrar en nuestra Diócesis la próxima semana, del 17 al 19 de mayo, en colaboración con la Unión Católica de Informadores y Periodistas de España. Así, ha hecho mención especial a la participación de José Gabriel Vera,responsable de comunicación de la Conferencia Episcopal Española, que impartirá la charla “Comunicación e Iglesia. Nunca digas nunca jamás”; y Eva Fernández, corresponsal de COPE y TreceTV en el Vaticano, que pronunciará la conferencia “Comunicar para construir: la brújula del Papa Francisco y el Beato Lolo”.
Del mismo modo, ha pedido a los medios que le trasladen cuáles son sus preocupaciones y sus intereses, de cara a próximas jornadas de medios.
Con una foto de familia ha concluido este encuentro que se está convirtiendo en una tradición y que se celebra anualmente, en torno a la Solemnidad de la Ascensión del Señor.
El clero de la diócesis de Córdoba se ha dado cita en Montilla para celebrar un año más el día del patrón del clero secular español, San Juan de Ávila
La festividad de San Juan de Ávila es cita ineludible en la diócesis. Un año más, el día de la fiesta del patrón del clero secular español, el 10 de mayo, ha congregado a todo el clero cordobés en el lugar en el que se veneran sus restos mortales, la Basílica de San Juan de Ávila de Montilla.
En torno al sepulcro del Santo Maestro, han celebrado la santa misa presidida por el obispo de Córdoba, monseñor Demetrio Fernández, quien en su homilía ha recordado que la fiesta de San Juan de Ávila es un día para “pedirle algo de su espíritu, que lo transfunda desde su corazón ardiente de amor a Jesucristo a nuestro corazón sacerdotal, que transfunda ese celo apostólico que le llevó a ganar muchas almas para Cristo”.
El prelado ha hecho un recorrido por la biografía de San Juan de Ávila, que entregaba su alma a Dios en Montilla, el 10 de mayo de 1569, y que ha convertido a la ciudad en un punto de peregrinaciones, especialmente a su sepulcro y la casa donde vivió que aún se conserva.
“San Juan de Ávila atendió a muchas personas, entre ellas, jóvenes, laicos, sacerdotes y consagradas como Sancha Carrillo o Sor Ana de la Cruz. Era ‘maestro de sacerdotes’; ahí está una legión inmensa de sacerdotes jóvenes muchos de ellos que llegaban a discernir su vocación y encontraban el camino en la escuela sacerdotal del Maestro Ávila”, ha subrayado el Obispo destacando sus escritos, su estilo de vida, su ser sacerdotal, “algo que ha influido enormemente en la escuela sacerdotal francesa”.
San Juan de Ávila acompañó a dominicos, jesuitas, franciscanos, agustinos… todo tipo de carismas. “Un sacerdote diocesano unido a su Obispo es fuente de todos los carismas”, ha aclamado el pastor de la Diócesis haciendo además un recorrido por la constelación de santos que desfiló por la vida del Maestro buscando discernimiento y acompañamiento, tales como san Ignacio de Loyola, san Francisco de Borja, san Juan de Dios o santa Teresa de Jesús, entre otros. “Hay además muchos hombres y mujeres que han encontrado en él su aliento y su apoyo, porque San Juan de Ávila tenía un corazón fraguado en el amor a Cristo, enamorado de Jesucristo, entregado a Jesucristo y quería parecerse a él y vivir como él en todos los aspectos de su vida”, ha dicho.
Asimismo, monseñor Demetrio Fernández ha pedido a los presbíteros y seminaristas “parecerse a San Juan de Ávila”, quien a pesar de ser hijo de familia rica, dejó todo para encontrarse con Jesucristo y vivir como él. “El secreto del corazón de San Juan de Ávila es que se cree aquello que predica, que lo vive en una relación con Jesucristo llena de amor”, ha explicado el Obispo para pedir a los sacerdotes seguir este camino, “el camino que nos enseña San Juan de Ávila, el de entregar la vida toda cuanto antes mejor y no reservarse nada para poder llegar a ser sacerdotes santos”. “Somos llamados a ser sacerdotes santos y hoy venimos a pedirle a este Maestro que nos de algo de su espíritu porque ciertamente la reforma de la Iglesia depende de la santidad de los sacerdotes y del fervor de los seminarios”, ha aclamado.
“Ser sacerdote no es una colocación cualquiera, es una vocación de entrega de la vida entera, cada uno con la capacidad que tenga y el momento en el que se encuentre, pero sin olvidar que el Señor nos llama a ser santos sacerdotes”. Al hilo de esto, ha pedido también a los presbíteros trabajar más por las vocaciones sacerdotales y darle gracias a Dios por el buen Seminario que tiene Córdoba.
Bodas de oro y de plata
Es un día de fraternidad sacerdotal, en el que también se ha celebrado las bodas de oro y de plata de los sacerdotes de la Diócesis, una jornada de fiesta y oración que convoca a todos en torno al Maestro de Santos para seguir su huella indeleble. En esta ocasión, han sido cinco los sacerdotes que han conmemorado sus bodas de oro, entre los que se encuentra el obispo de Córdoba, monseñor Demetrio Fernández, junto a Manuel Pérez Moya, Marcelino Priego Borrallo, Ramón Martínez Montero y Antonio Murillo Torralbo. Mientras que otros doce han celebrado sus bodas de plata: Jesús Joaquín Corredor Caballero, Jesús Poyato Varo, Domingo Prados Romero, Antonio J. Reyes Guerrero, Fernando Martín Gómez, Fernando Arrocha Duarte, S.J., Alfonso Rodríguez Ortega, Carmelo María Santana Santana, José Luis Borja Botia, José Machado Rodríguez, André Bernard Missengue Missengue y Antonio Schlatter Navarro.
A todos ellos, se les ha rendido homenaje y se le ha entregado un recuerdo especial de este día, en el que han dado gracias a Dios por estos años de ministerio.
Por su parte, el Obispo se ha dirigido a los sacerdotes que cumplen sus bodas de oro para pedir que en la última etapa de su vida, “el Señor nos conceda la gracia de entregarnos del todo para el bien de su Iglesia”, mientras que a aquellos que cumplen sus bodas de plata les ha pedido que se den del todo a Jesucristo “y saldréis ganando”.
Cita en el Teatro Garnelo
Tras la celebración de la eucaristía, el sacerdote diocesano Guillermo Padilla Sánchez ha ofrecido una conferencia titulada “La necesaria configuración del sacerdote con Jesucristo crucificado para la nueva evangelización en San Juan de Ávila”, en la que ha explicado cómo es necesario que el sacerdote se configure con Cristo crucificado por la cruz, por el sufrimiento, para la fecundidad apostólica de su ministerio. “Esto se verá por dos cosas. Primero, viendo cómo San Juan de Ávila ha quedado configurado con Cristo por medio de su cruz personal y, segundo, cómo esto se concreta en el sacerdote a través de la pobreza, la castidad, la obediencia y del ofrecimiento de la vida”, ha descrito Padilla. Según el ponente, esta configuración existencial no se queda en lo abstracto, sino que se concreta precisamente en configurarse con Cristo crucificado.
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