Inicio Blog Página 111

El amor no entiende de religiones

0

El amor no entiende de religiones

Ha amanecido de nuevo cerca del mar. Ya, en el hospital, voy antes que nada a ver a mi amigo de Marruecos. Ingresó hace pocos días, en cuidados paliativos, consciente que estos son ya sus últimos días.

No tardamos mucho tiempo en sintonizar. Hablamos de muchas cosas, pero sobre todo de los miedos que nos llegan y nos atrapan cuando el daño es grave y no te deja muchas escapatorias.

Él, acostado en la cama y yo, sentado junto a él sobre una silla, le tendí la mano y enseguida me la aferró como para sentirse seguro y acompañado. La soledad deja grietas que no sabemos hasta dónde pueden llegar…  Lloró, rió y creo que yo también hice mi parte. Cuando el corazón fluye sinceridad y en las palabras hay dolor buscando esperanza, las lágrimas curan y sanan heridas, porque la palabra ha tenido su momento de ser pronunciada y también escuchada.

Ayer me detuve por casi tres horas, con mi mano entre la suya. Me agarraba como para no soltarme, como para sentir paz. Yo también la sentí. Una música suave nos acompañaba y, cuando abría de vez en cuando los ojos, me sonreía como agradeciendo la compañía. Yo asentía.

Hoy, de nuevo me he acercado a primera hora, con la duda de saber cómo estaría. Y lo encontré agonizando y acompañado por un amigo que trabajaba con él en los invernaderos. Me acerqué para tocarle la frente y hacerme presente. Abrió los ojos y me sonrió haciendo un esfuerzo grande. Le agradecí su sonrisa y le dije que me alegraba muchísimo de poderlo ver y saludar.

Al finalizar la jornada en el hospital, después de haber visitado más pacientes y sus familias, me acerqué de nuevo y todo indicaba que era el último tramo. De nuevo toqué su frente y abrió los ojos una vez más. Le saludé y besé su frente. Él tomó mis manos para acercar mi cara a la suya y selló su amistad regalándome un beso de amor, de despedida y de agradecimiento.

El amor no entiende de religiones, ni de momentos, ni de circunstancias. El amor se da porque existe y vive. Y cuando nos encontramos con ese amor, es cuando entendemos que la paz es el camino y que el amor pone su luz insuperable.

Hoy voló al cielo de todos donde, cuando llegue mi hora, espero que sea él quien también me espere.

Gracias, amigo, por tanto bien en tan poco tiempo.

Juan Manuel Arija (sdc)
Capellán Hospital Vázquez Díaz

La entrada El amor no entiende de religiones se publicó primero en Diócesis de Huelva.

Ver este artículo en la web de la diócesis

El Jubileo de la Salud se celebrará el 25 de mayo en la Catedral

0

Será un signo de unidad y misericordia, “un mensaje de esperanza para un mundo que, aún en la fragilidad, sigue buscando luz”

La Pastoral de la Salud organiza el próximo 25 de mayo, en el marco del VI Domingo de Pascua, el Jubileo del Mundo de la Salud, una cita organizada con motivo del Año Jubilar convocado por el Papa Francisco bajo el lema “Peregrinos de Esperanza”, que en la Campaña del Enfermo se concreta con el lema “En esperanza fuimos salvados”.

Para esta jornada, el Secretariado diocesano de Pastoral de la Salud pide a las comunidades cristianas la oración “con y por los enfermos”. “Es una ocasión para renovar la esperanza, sembrarla en medio del sufrimiento y reafirmar que la fe es una roca firme en las tempestades de la vida”, explican.

El acto central será la celebración de la Eucaristía que tendrá lugar a las 12:00 horas, en la Santa Iglesia Catedral, y será presidida por el Obispo electo monseñor Jesús Fernández. A este Jubileo están convocadas no solo las comunidades parroquiales, sino también la Iglesia Samaritana y las instituciones civiles dedicadas a curar, cuidar y consolar.

Desde la organización se ruega confirmar la asistencia antes del 23 de mayo, especialmente indicando el número aproximado de enfermos que acompañarán el evento.

La entrada El Jubileo de la Salud se celebrará el 25 de mayo en la Catedral apareció primero en Diócesis de Córdoba. Ver este artículo en la web de la diócesis

Finalizan varios trabajos de restauración

0

Finalizó la primera fase de la restauración del retablo del Señor de la Cañita, ubicado en la iglesia parroquial de Ntra. Sra. de la Concepción, en Santa Cruz de Tenerife. Los trabajos de restauración han corrido a cargo de la empresa Restaurando Canarias, S.L. Se trata de un retablo en madera tallada, policromada y dorada, de autor anónimo y estilo barroco (anterior a 1737). El presupuesto de esta fase ha sido financiado en su totalidad por el Cabildo Insular de Tenerife, dentro del Programa de Restauración de Bienes Muebles (2024) de Titularidad Eclesiástica de la isla de Tenerife y cuyo coste total fue de 31.822 €.

Por otro lado, concluyeron las obras de restauración en el retablo de San Pedro y Santos Varones, ubicado también en la iglesia parroquial de Ntra. Sra. de la Concepción, en Santa Cruz de Tenerife. En este caso, el restaurador ha sido Carlos Gustavo García Ramos. Se trata de un retablo en madera tallada, policromada y dorada, de autor anónimo y estilo barroco (c. 1740) y con modificaciones en el siglo XX. El presupuesto de esta fase ha sido financiado en su totalidad por el Cabildo Insular de Tenerife, dentro del Programa de Restauración de Bienes Muebles (2024) de Titularidad Eclesiástica de la isla de Tenerife y cuyo coste total fue de 51.948,50 €.

Por su parte, el retablo de Ntra. Sra. de las Mercedes, ubicado en la iglesia parroquial de San Marcos Evangelista, en Agulo – La Gomera, ha sido entregado tras concluir los trabajos de restauración llevados a cabo por el anteriormente mencionado restaurador, Carlos Gustavo García Ramos. Se trata de un retablo neogótico en madera tallada, policromada y dorada, con técnica de marmoleado; datado en el primer tercio del siglo XX (c. 1923) y autor anónimo. El presupuesto ha sido financiado íntegramente por el Cabildo Insular de La Gomera, dentro del Convenio de Cooperación entre el Cabildo y el Obispado de Tenerife (2024), para la Restauración del Patrimonio Cultural de Titularidad Eclesiástica en la isla de La Gomera y cuyo coste total fue de 34.200 €.

Ver este artículo en la web de la diócesis

PALABRAS DEL DELEGADO EPISCOPAL EN EL INICIO DE SU MISIÓN CON LAS HERMANDADES Y COFRADÍAS DE ALMERÍA

0

Queridos cofrades almerienses:

Como ya sabéis, nuestro Obispo me ha llamado para ponerme a vuestro servicio y ayudaros a vivir la preciosa misión que habéis recibido en vuestras diferentes cofradías o hermandades. Coincide este ministerio con la celebración, en la Ciudad Eterna, del Jubileo de las Cofradías. Precisamente el papa Francisco, de feliz memoria, al convocarnos para este Año Santo de la Esperanza nos dijo: «Esta esperanza, mucho más grande que las satisfacciones de cada día y que las mejoras de las condiciones de vida, nos transporta más allá de las pruebas y nos exhorta a caminar sin perder de vista la grandeza de la meta a la que hemos sido llamados, el cielo» (Spes non confundit n. 25).

Todos nosotros, ayudándonos mutuamente desde nuestras confraternidades, hemos podido vivir esta esperanzadora realidad. También yo, desde pequeño, he podido experimentarlo y estimular mi fe bautismal con las maravillosas expresiones de la religiosidad popular en mi Garrucha natal. Ya sea para testimoniar nuestra fe en la Pasión, Muerte y Resurrección del Señor; o bien para proclamar la maternidad de Nuestra Señora o la intercesión de los Santos. Vivirlo, además, de manera comunitaria es un hermoso testimonio de nuestra pertenencia a la Santa Iglesia.

Ese es, precisamente, mi cometido para con vosotros. Acompañaros y ayudaros a ser conscientes y vivir, de la mejor manera posible, la misión evangelizadora que explica la naturaleza de cada cofradía o hermandad. Vivir, en el corazón de la Iglesia, la llamada del Señor Resucitado: «Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación» (Mc 16, 5). ¡Recuperemos esta invitación que originó nuestra pertenencia a nuestra cofradía o hermandad!

En el momento presente, apelo a vuestra paciencia y caridad para conmigo. Trataré de que vayamos conociéndonos, escuchándonos y dialogando para ser dignos de la misión que todos hemos recibido. Sabiendo que no somos meros custodios de tradiciones venerables, sino bautizados con la encomienda de ofrecer un testimonio vivo a nuestra sociedad.

Ruego a Nuestra Señora, tan amada en nuestra tierra almeriense en sus múltiples advocaciones, que nos ampare maternalmente a todos. Quedo, humildemente, a vuestra disposición y servicio.

Jueves, 15 de mayo de 2025, Fiesta de San Indalecio

Andrés Francisco Rodríguez Quesada

Delegado episcopal para las Hermandades y Cofradías

Ver este artículo en la web de la diócesis

CORAZÓN DE LEÓN, por Jesús Martín Gómez

0

He tenido la oportunidad de asistir recientemente a un evento católico. No se trataba de ninguna de esas concentraciones de gente a las que nos invitan con diversos motivos. Tampoco de un evento con motivo del jubileo, una procesión, un encuentro o una asamblea. Se trataba de una boda, en día laborable por la mañana y alejada de todo tipo de foco mediático. El novio, un neófito que recibió la Iniciación Cristiana en la pasada vigilia pascual, un músico que durante muchos años ha coqueteado con todo tipo posiciones ideológicas. La novia, una católica devota, una artista, que ha llevado su visión de la belleza a algunas de las salas más importantes de Europa. Los invitados, pueden imaginárselos con semejantes currículos. En aquella mesa estábamos sentados al menos diez nacionalidades distintas y, sin embargo, no éramos más de veinte.

Al estar allí, frente al mar, en el encantador restaurante que eligieron para la celebración, me venía a la cabeza la definición de lo que debe considerarse católico. Lo propiamente católico no es encerrarse en definiciones dogmáticas y atrincherarse en “una tradición”, distíngase de “la Tradición” con mayúscula, que es incapaz de dar respuesta a los desafíos actuales de la humanidad, porque a la larga es solo una imagen de lo que fue, que conmueve estéticamente, aunque carezca de todo contenido y haya perdido lo esencial. Pero tampoco es el adaptarse a todas las ideologías para que todos encuentren su lugar en el que a modo de gueto nos convirtamos en islas estancas a la defensiva contra la verdad profunda de la Iglesia. Como sucedió a algunos de los teólogos de la liberación que reconocían haberse olvidado de la Iglesia y de Cristo en sus posiciones revolucionarias.

Lo propiamente católico es la hospitalidad. «Ser católico, es decir, ser hospitalario —afirma Erik Varden—, es habitar un espacio vasto y acogedor y respirar en él un aire fresco de montaña […]. Invitar a otros y permitirles la experiencia de estar en casa […]. Generar un todo a partir de partes dispares, manteniendo cierto grado de tensión». En aquella mesa frente al mar probablemente no todos éramos bautizados en la Iglesia católica, pero había un auténtico ambiente católico gracias a aquellos novios que nos llamaban “familia”. No hace aún una semana desde que el Papa León XIV se asomó a la ventana de la Logia de la Basílica de San Pedro. Al escuchar sus primeras palabras entendí que probablemente en el corazón de León, un hombre con un currículo semejante al de los invitados de aquella boda, latía con fuerza este sentido de lo católico. Probablemente ha llegado el momento de reclamar este tesoro y ofrecerlo a la humanidad. Ha llegado el momento de sentir el orgullo de ser católicos.

Jesús Martín Gómez

Párroco de Vera

Ver este artículo en la web de la diócesis

El Papa León XIV ya tiene cuenta en X

0

El Pontífice 267 de la Iglesia Católica abrió en la jornada de ayer su cuenta en la red social X.

PINCHA AQUÍ PARA VER EL PERFIL DEL PAPA LEÓN XIV

Hace una semana, Roma acogía el inicio del Cónclave. Este proceso, que se lleva a cabo para la elección de un nuevo sucesor de Pedro acabaría en la tarde del día siguiente con el anuncio del Papa León XIV.

Tras conocerse su escudo y lema, y seguir sus primeros pasos y discursos como Santo Padre, en la jornada de ayer desde la Santa Sede se hizo público la creación del perfil del Papa León XIV en la red social de X.

El primer mensaje que ha realizado es el siguiente:

¡La paz esté con todos ustedes! Este es el primer saludo de Cristo resucitado, el Buen Pastor. También yo quisiera que este saludo de paz entre en sus corazones, llegue a sus familias, a todas las personas, dondequiera que estén, a todos los pueblos, a toda la tierra.

La entrada El Papa León XIV ya tiene cuenta en X se publicó primero en Diócesis Asidonia – Jerez.

Ver este artículo en la web de la diócesis

«Llévame a la capilla»

0

«Llévame a la capilla»

La Hna. Inmaculada Florencio lo declara en uno de sus testimonios: «Tengo grabado en lo más profundo de mi alma esa súplica continua de la Madre: “Llévame a la capilla”, a pesar de estar tan enferma y ciega en los últimos años de su vida y con el agotamiento propio de haber sufrido varios infartos/…/ Puedo asegurar que el Señor, desde el Sagrario, fue su refugio y único consuelo en la vida de la Madre».

Estas palabras pueden servirnos de introducción para caldear y preparar nuestros corazones para la solemnidad del Corpus Christi, el Pan vivo que ha bajado del cielo.

La Madre Luisa nació en Nerva, Huelva, en 1918. Su devoción a Jesús Sacramentado, vivo y resucitado, se hizo patente a raíz de la locución que recibió del Nazareno en el año 1939: “Has de fundar”.

A partir de entonces, entregó toda su vida al cuidado de los enfermos y los más necesitados. La Madre narra con detalle, en su escrito autobiográfico El Origen de la Obra, cómo atendieron a la primera enferma. Tras tres meses de cuidados y cariño, al ver que se le acercaba la hora, cuenta cómo le organizaron la visita de Jesús Sacramentado a su casa: «Recibió todos los sacramentos. Fue emocionante y consolador cuando le llevaron al Señor. Nosotras estábamos con la enferma esperando la llegada. ¡Qué emoción! Son cosas imborrables. Los años no quieren caer sobre ellas, para que no se olviden. Era la primera vez que Jesús sacramentado salía solemnemente por las calles de Nerva para dirigirse a un barrio y yo saboreé intensamente, silenciosamente, este regalo que el Señor nos hacía. Recuerdo que le preparamos un sagrario de flores para que descansara cuando llegó».

Mons. Cantero Cuadrado, el primer obispo de Huelva, autorizó a la Madre Luisa y a las Hermanas a vivir en comunidad el 2 agosto de 1955. Y le pidió que, mensualmente, le escribiera una carta dándole cuenta pormenorizada de todo. Se conservan estas cartas y suponen un tesoro, pues en ellas la Madre expresa lo que supone para ella tener a Jesús Sacramentado en casa.

Ya en la primera, de 2 de septiembre de 1955, además de contarle con todo detalle la vida de comunidad, el apostolado con las ancianas y las obras de caridad que llevaban a cabo, aprovecha para formularle su gran deseo de tener el sagrario en la casita donde vivía con las Hermanas: «Solo quiero deciros que cada día estamos más contentas, viendo realizado nuestro ideal de consagrarnos por entero al servicio de Dios Nuestro Señor y de sus pobres. Que vamos procurando adelantar en virtud y que pedimos al Señor que nos dé su gracia para no reparar en sacrificios por buscar su gloria, nuestra santificación y el bien de nuestros hermanos. También quiero decirle, señor, que sentimos mucho frío en nuestra casita porque nos falta en ella el Señor. El día que V.E. se digne concedernos el sagrario, seremos intensamente felices. Él lo caldeará todo con su amor y lo llenará con su gracia».

En la siguiente, de 19 de octubre, salta de alegría al pensar que ya está próximo el Santísimo: «No podría expresar a V.E.R. la alegría que hemos sentido al recibir vuestra carta con la esperanza del sagrario. No cesamos de dar gracias a nuestro Señor y a la Santísima Virgen, que nos miran con tanta misericordia». Y le adjunta la solicitud oficial para recibir a Jesús sacramentado en aquella casita tan pobre:

            «Que, disponiendo de una habitación, aunque humilde, decorosamente preparada para recibir a Jesús sacramentado y estando dispuestas a adquirir lo necesario en el momento oportuno, desean ardientemente tener en su casa a Nuestro Señor, para que la llene de luz, de gracias y bendiciones y al amparo de Su amor, adelantar en perfección e incrementar en las ancianas la vida eucarística con frecuentes visitas a la Parroquia que, por sus achaques, no pueden hacer.      Por lo que Suplican de V.E.R. se digne concederles la gran merced de tener el Reservado en su casa, comprometiéndose a atender a Jesús en el Sagrario con amor y cuidados, aun a costa de sus propias vidas.»

Lamentablemente, el día 2 de noviembre la Madre recibe la triste noticia del Sr. Obispo de que aún deben esperar a tener a Jesús Eucarístico en casa. Es sorprendente la sumisión y la aceptación en obediencia de la voluntad de Dios, que se manifiesta en ella a través de las circunstancias. Dice así: «Es verdad que sentimos ardientes deseos de tener a Jesús en nuestra casa; más que nada en el mundo lo deseamos. Mas por encima de todo esto —con ser más fuerte el deseo que nuestra propia vida— deseamos y anhelamos con toda nuestra alma cumplir la voluntad de Dios, que se ha de reflejar en la vuestra. Y así, con toda la sencillez de mi alma, digo desde el fondo de mi corazón: “Hágase vuestra voluntad, señor y padre mío, ahora y siempre”, en la seguridad de que la aceptaremos resignadas y gozosas, bendiciendo al Señor que, en alegrías y penas, siempre quiere para nosotras lo mejor. Sólo le pido humildemente se digne tener en cuenta nuestro deseo y en el momento oportuno se acuerde de estas hijas vuestras que suspiran anhelantes por tener a Jesús en su casita, para rodearle de toda la ternura de sus corazones».

Tuvieron que esperar hasta el 24 de marzo de 1956, tras de más de seis meses de la primera solicitud, para tener a Jesús sacramentado en casa. Exultante de alegría, la Madre explica lo que supuso para ella recibir al Santísimo en casa:

            «¡Qué momento, Dios mío! ¿Cómo pude resistirlo? Al llegar aquí, de verdad que no me es posible decir nada de lo que sentí. Ahora, como entonces, solo puedo caer de rodillas y llorar de gratitud, de alegría de emoción. Jesús Sacramentado con nosotras, bajo nuestro mismo techo… Un sitio más donde adorarle y darle gloria… ¡Para volverse loca!

            Entonces cambió mucho mi vida interior. Ya tenía a quién contarle mis cosas, mis penas, mis alegrías, mis preocupaciones. A sus pies trazaba mis planes de todos los días. A sus pies escribía todo lo que me parecía importante, porque pensaba que él no consentiría que me equivocase. A sus pies tomaba las determinaciones necesarias. Allí cerquita de mi Jesús, muy cerquita siempre. También en mis hermanas influyó profundamente su presencia. Muchas veces, sobre todo en los momentos de apuro, nos levantábamos a las 3:00 de la madrugada, muchas noches seguidas, —y eso que había que atravesar un patio para llegar a la capilla—, y hacíamos oración y siempre, siempre, rezábamos el Trisagio a la Santísima Trinidad.

            Él lo era todo para nosotras. Todo lo arreglábamos yéndonos allí con él y exponiéndole nuestras dificultades, que fueron tantas».

Aparte de estas cartas tan clarificadoras a Cantero Cuadrado, hemos podido acceder a sus anotaciones de los retiros, de los que entresacamos esta, referente a la Eucaristía: “La Meditación de las 5 de la tarde, con el Señor expuesto, ha sido sobre la Eucaristía. ¡Algo maravilloso! Yo no puedo expresar la impresión que me ha hecho. Ha sido como una respuesta a mis comuniones, en las cuales yo siempre doy gracias dirigiéndome a las Tres Divinas Personas y esto me preocupaba, a veces, pensando que si no debería hacerlo así. Pero no me es posible dar gracias de otra forma” (31 de mayo de 1985).

Terminamos con esta breve Canción para la Primera Comunión que la Madre Luisa compuso, letra y música, para una persona muy allegada:

Rompe los cielos, Señor

caigan de ángeles legiones

brote en la tierra la flor

canten nuestros corazones.

Porque en el cáliz de un lirio

blanco, puro, inmaculado

vas a colmar el delirio

de tu amor, Verbo humanado.

Hija, el lirio eres tú

tu inocencia, su hermosura

pídele al Niño Jesús

que te guarde siempre pura

que en tu almita nunca caiga

nada que manche su albor.

Pídelo, hija, mi vida

pídelo con mucho amor.

La Madre Luisa Sosa falleció el 25 noviembre de 2017, y ya se ha iniciado el proceso de beatificación en la Diócesis de Huelva.

Celia Hierro Fontenla
Postuladora de la Causa de beatificación de la Madre Luisa Sosa Fontenla

La entrada «Llévame a la capilla» se publicó primero en Diócesis de Huelva.

Ver este artículo en la web de la diócesis

V Domingo de Pascua – Ciclo B

0

V Domingo de Pascua – Ciclo B

Es costumbre humana hablar mucho de aquello que añoramos o echamos en falta para llenar la ausencia con la evocación y el recuerdo. En base a esto, podemos concluir que en nuestro mundo falta mucho amor. Por eso es siempre nuevo el mandamiento de Jesús: amaos como yo os he amado. No era nuevo entonces, ni lo es hoy, el precepto de amar al prójimo como a uno mismo, pero se presta a error, porque, si uno es la medida del amor a los demás, depende de cómo sea uno para que así sea el amor. Jesús corrige esto y se presenta él mismo como modelo. Ya había dicho en otra ocasión que nadie tiene amor más grande que el que da la vida por aquellos a los que ama y que el amor de Dios al mundo le llevó a entregarle a su propio hijo. Con este precepto Jesús establece el fundamento del ser y de la  convivencia sobre una nueva base: el amor como entrega, el amor absolutamente gratuito y desinteresado. Está proponiendo la utopía.

Tal vez el problema de nuestro mundo y de nuestra cultura sea creer que el amor así entendido es imposible y haber renunciado al mejor proyecto de vida posible. Proponiendo un amor al otro como el suyo, Jesús está asentando los cimientos de un mundo nuevo y mejor. Ignorar o menospreciar su propuesta conduce al miedo o a la huida. Cuando caemos en el miedo, aparece la competencia, la envidia, la mentira, la manipulación, la ira, la división, el sectarismo… Cuando huimos, nos refugiamos en paraísos imaginarios, en placeres que nunca satisfacen y que tantas veces llevan al vacío o la degradación del ser humano. Frente a la cultura del desamor, el cristiano propone la cultura del amor y de la vida, es decir, se empeña en construir un mundo en el que todos se sientan y vivan como hermanos y donde el amor sea el valor que inspire todos los proyectos.

Ese amor será el distintivo de los suyos. Esto quiere decir que, cuando la joya del amor se oscurece, no importa que brillen otras alhajas porque todo huele a falso. Pero si el amor está presente, no importa la carencia de otras cosas, porque el amor da autenticidad y sumo valor a todo lo humano por insignificante que sea. Jesús quiere crear un espacio donde el amor exista como una realización de la utopía. Ese es precisamente el signo que ha de identificar a los cristianos en medio del mundo: demostrar que es posible lo que parece imposible, que Dios es padre y que los hombres pueden ser hermanos. En eso radica la gloria del hombre y la gloria de Dios. Y un último detalle que no hay que olvidar: cuando Jesús habla, antes ya ha hecho. No es hombre de sólo discursos, sino de compromisos. Por eso antes de decir lo que hay que hacer, él ha lavado los pies a los suyos para indicar con ello que el servicio es la manifestación más clara del amor.

Francisco Echevarría

La entrada V Domingo de Pascua – Ciclo B se publicó primero en Diócesis de Huelva.

Ver este artículo en la web de la diócesis

La Delegación de Hermandades y Cofradías vive intensamente el Jubileo «Peregrinos de Esperanza»

0

Este departamento diocesano ha preparado para las Hermandades y Cofradías un certificado oficial de que han ganado el Jubileo visitando los templos jubilares y realizando las distintas indicaciones que se deben llevar a cabo.

A pocos días de celebrar en Roma el Jubileo de las Hermandades y Cofradías, la Delegación Diocesana de Hermandades y Cofradías de Asidonia-Jerez vive durante este año el Jubileo de forma especial. Desde la apertura a nivel diocesano, donde participaron Hermandades y Cofradías de toda la Diócesis hasta las distintas actividades previstas para ganar la Indulgencia Plenaria durante todo el curso, se aprovecha de forma más intensa para profundizar en este año de gracia como nos pide la Iglesia.

Perteneciente a nuestra historia este Jubileo 2025, desde la Delegación Diocesana de Hermandades y Cofradías se ha preparado un certificado oficial para hacer entrega a las Hermandades y Cofradías que gane el Jubileo. Para conseguir este certificado solamente deben solicitarlo a través del correo electrónico infohermandades@@diocesisdejerez.org.

La entrada La Delegación de Hermandades y Cofradías vive intensamente el Jubileo «Peregrinos de Esperanza» se publicó primero en Diócesis Asidonia – Jerez.

Ver este artículo en la web de la diócesis

CORAZÓN DE JESÚS EN CAMAS (parroquia)

0

CORAZÓN DE JESÚS EN CAMAS (parroquia)

El municipio de Camas está muy cerca de la capital. Es un lugar de gran importancia histórica, relacionado principalmente con Tartessos.

Junto a la antigua carretera nacional Gijón-Sevilla, en el cruce con la que sube al Aljarafe, hacia Valencina de la Concepción y otras poblaciones, está la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Fuente, y delante del templo, lindando con la carretera, encontramos una imagen monumental del Sagrado Corazón de Jesús.

Esta imagen ha sufrido una serie de renovaciones en los últimos años, tanto en su aspecto exterior como en el lugar de veneración: de imagen pintada en varios colores a estarlo de blanco, y de estar situada en el centro de una zona ajardinada a una explanada abierta, donde puede ser contemplada con más facilidad.

Jesucristo está representado vestido con túnica y manto, con los brazos extendidos y las manos abiertas y la cabeza mirando al frente. La imagen, orientada hacia el centro de la población, estuvo colocada sobre una base pequeña, y posteriormente, se elevó para poder ser contemplada mejor. En el centro del pecho resalta el corazón, sobre la túnica. Y a los pies de la imagen, los símbolos de la Pasión de Cristo representados en el cáliz y la corona de espinas.

Leemos una inscripción en la base: «Sagrado Corazón de Jesús. El Cristo del Mineral. “Estoy con vosotros hasta el fin del mundo”. Año 2016». Cuentan que a Camas llegaban los trenes mineros de la sierra y del Aljarafe y allí se efectuaban los transbordos a los vagones grandes para su transporte.

Ante esta imagen del Sagrado Corazón conocida como el Cristo del Mineral nos percatamos que Jesucristo quiere y desea estar presente en todos los lugares, y es una llamada a acoger su presencia y cambiar nuestra vida.

Federico Jiménez de Cisneros

The post CORAZÓN DE JESÚS EN CAMAS (parroquia) first appeared on Archidiócesis de Sevilla.

Ver este artículo en la web de la diócesis

Enlaces de interés

ODISUR
Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.