El Presidente de CONFER, Elías Royón, ha presidido esta mañana la Eucaristía de imposición de la ceniza con la que se inicia el camino cuaresmal.
Durante la celebración, a la que ha asisitido el personal de CONFER, el presidente ha indicado que "el miércoles de ceniza se abre un tiempo favorable al cambio, a la conversión. Dios, Señor del tiempo, nos regala otra nueva oportunidad de detener nuestras prisas y situarnos ante la contemplación de una realidad sublime: Dios nos ama. Dios no es simplemente amor; Dios existe amando a cada hombre y a cada mujer como únicos, irrepetibles, singulares."
En sus palabras, ha animado a que cada vez que oigamos "la palabra conversión, en realidad la Iglesia, la liturgia quiere recordarnos que Dios nos ama, que Dios nos espera siempre… que sale al encuentro, que no se acostumbra nunca a vernos olvidados de su amor, alejados de nuestra realidad más íntima: que somos sus hijos." Ha finalizado la homilía diciendo que "en su cruz se acumulan nuestros desvíos y olvidos y su corazón traspasado nos invita a mirar y dejarse mirar, y a bañarse en el agua y en la sangre de su salvación para volver a la vida en su resurrección."
De esta forma, ha comenzado el tiempo cuaresmal, ojalá sean unos días de pararse y volver la mirada a Dios.