El domingo 20 de septiembre, en Misa de 12, Antonio Collado Rodríguez tomó posesión como nuevo párroco de San Miguel, en el Miramar, y John F. Echavarría Arango como vicario parroquial.
La ceremonia estuvo presidida por el Vicario General de la Diócesis D. José Ferrary, al que acompañaron en el presbiterio un total de once sacerdotes, entre los que se encontraban el arcipreste, José Sánchez, y el párroco saliente, Fernando del Castillo, así como los Padres Miguel Vita y José María Peña, de la Congregación de la Misión (PP.Paules).
Con este acto, la Congregación de la Misión ponía de nuevo en manos de la Diócesis la parroquia que le fue encomendada desde su erección en 1942, si bien su presencia en Málaga y en el barrio del Limonar –ya casi nonagenaria- se remonta a 1927, cuando llegaron los primeros Padres Paúles para atender, entre otras labores, la entonces capilla de San Miguel.
En una emotiva ceremonia, siguiendo el ritual previsto para la ocasión (proclamación de la Palabra, incensación de la pila bautismal, asentamiento en la sede y entrega de la llave del sagrario) el nuevo párroco tomaba así el testigo en esta nueva etapa de su vida sacerdotal.