El viernes tuvo lugar en la sede de la Fundación Diocesana de Enseñanza Santa María de la Victoria el acto de apertura del curso académico 2012-2013 para los centros de la Fundación. El Sr. Obispo, en su discurso inaugural, ha agradecido a los profesores «su ilusión, entrega y generosidad» lo que constituye, en su opinión, «la diferencia cualitativa de nuestros centros». En un curso marcado por la celebración eclesial del Año de la Fe, D. Jesús Catalá ha pedido a toda la comunidad educativa que tenga muy presente este acontecimiento y «que promueva el acercamiento a la Palabra de Dios».
En su alocución, el prelado ha recordado que en sus visitas a los centros de la Fundación, los alumnos valoraban y agradecían que se les hablara del Evangelio. En este sentido, ha afirmado que «nosotros no forzamos a nadie a creer. Ofrecemos el Evangelio, lo enseñamos, se informa a los alumnos, se les anima, pero nunca se les fuerza y eso lo valoran mucho. Esa es la gran oferta que nuestros centros ofrecen a la sociedad».
El acto, que ha tenido lugar en el patio del pabellón Emilio Benavent del Colegio Cardenal Herrera Oria, comenzó a las 7 de la tarde con la oración y la lectura de la memoria del curso pasado por parte del secretario técnico de la Fundación, Francisco José González Díaz. Una memoria agradecida por el éxito de los eventos programados con motivo del 60 aniversario de la institución educativa, destacando el congreso educativo y la peregrinación a Roma. La modernización de numerosas instalaciones, la implantación de pizarras digitales y nuevas redes informáticas así como el comienzo de las obras de un nuevo colegio en Estepona destacan en los aspectos positivos de la memoria. En lo negativo, la grave situación a la que se enfrenta la escuela católica con motivo del impago de los conciertos por parte de la Consejería de Educación.
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, destacó en su intervención el prestigio de los centros de la Fundación y alabó la labor de desarrollo realizada en zonas rurales muy deprimidas y la forma en que a lo largo de su historia la Iglesia ha ido supliendo «las carencias de la administración educatica».
El vicepresidente de la Fundación, el sacerdote José A. Sánchez Herrera animó a los asistentes a iniciar este nuevo y difícil curso con «austeridad, sencillez, pero también con entusiasmo y alegría. El Año de la Fe -ha apuntado- nos viene como anillo al dedo en este curso para seguir profundizando en nuestra identidad. Tenemos que ser coherentes». El Inspector de Enseñanza Francisco Aguilar, que acudió en representación de la delegada provincial de Educación, Patricia Alba, hizo un llamamiento a continuar trabajando juntos por la mejora de la educación.
Al acto acudieron, asimismo, los obispos eméritos D. Antonio Dorado y D. Fernando Sebastián, los miembros del patronato, así como representantes del equipo de gobierno del ayuntamiento de la capital, de la Diputación Provincial de Málaga y el alcalde de Moclinejo, entre otras autoridades.