Los miembros de Cáritas Diocesana, reunidos con motivo de la celebración de su XXVI Asamblea, tras dos años de espera, a consecuencia de la pandemia, por fin pudieron dar un sencillo pero emotivo homenaje a Gabriel Leal por su incansable servicio a la institución sociocaritativa de la Iglesia durante más de 28 años.
Su sucesor en el cargo, Antonio Collado, fue el encargado de expresar, en nombre de toda la Comisión Permanente y de todos los agentes de Cáritas, el agradecimiento a tantos años de labor. Además de realizar un recorrido por toda su trayectoria también quiso ahondar en su experiencia personal. «Siempre tuve una relación cercana con Gabriel a nivel personal desde el Seminario, pero fue en nuestra etapa como vicarios episcopales, cuando esta se ahondó y enriqueció. Por esta razón puedo decir que, como persona, Gabriel hace honor a su apellido, “Leal”. Ha sido leal y fiel a Dios y a su llamada durante todos estos años. Fiel y leal a la espiritualidad de Carlos de Foucauld y a su vinculación a la Fraternidad Sacerdortal “Iesus Caritas”. Fiel y leal a las tareas que la Iglesia le encomendó y también leal a sus amigos porque es un hombre de palabra».
La responsable de Comunicación, Bárbara Santos, y la responsable de los centros sociosanitarios, Francisca Cabello, le hicieron entrega de un recuerdo con en el que, en palabras del delegado, «queremos mostrar nuestro cariño y admiración en reconocimiento a tu generosa entrega», concluía.
