Las Siervas de María cumplen 75 años de presencia en Málaga y lo hacen con una Eucaristía, el 12 de octubre, a las 11.00 horas, en su residencia, en la avda. Pintor Joaquín Sorolla, a la que invitan a todos aquellos que quieran acompañarlas. Estará presidida por José Luis Pereyra IMC, delegado episcopal para la Vida Consagrada.
El Padre Miguel Romón Vita, de los Padres Paúles, ha acompañado como confesor a estas hermanas, e invita a participar en esta celebración «a los muchos enfermos y familiares que recibieron la gracia de su asistencia eficaz y no menos bondadosa, para que den gracias al espíritu con que Dios ayudó a Santa María Soledad Torres Acosta y a todas sus hijas».
UN POCO DE HISTORIA
Fundadas por Soledad Torres Acosta, su carisma es servir a los enfermos, a quienes atienden esmerada y gratuitamente de día y de noche. Las primeras hermanas llegaron a la ciudad el 19 de enero de 1940, siendo acogidas por las Madres Reparadoras. El 25 de ese mismo mes iniciaron el desempeño de su carisma con los enfermos, en asistencia esmerada y gratuita a domicilio, haciendo realidad su lema, «estuve enfermo y me visitaste».
El Sr. Obispo, D. Balbino Santos Olivera, se interesó por ellas y las visitó, animándolas no sólo a «ser enfermeras, sino a trabajar con su testimonio de vida por la salvación de las almas». De 1974 a 1984, las Hermanas se hicieron cargo de las guardias nocturnas en el Hospital «Parque San Antonio», En septiembre de 1984, las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón solicitaron a la congregación la presencia de dos hermanas para las guardias de noche, y se atendió la petición.
En un principio, la comunidad se instaló en la calle Cortina del Muelle, 83, pasando después a Paseo de Reding, 28 y, en 1946, gracias a la ayuda y generosidad de los malagueños, se establecieron en el barrio de Bellavista, avda. Joaquín Pintor Sorolla, 9.
En la actualidad, la comunidad de Málaga acoge la enfermería de la provincia religiosa de Andalucía, con 21 hermanas, por lo que han tenido que abandonar su apostolado externo.
Ana María Medina
