En la tarde del IV Domingo del tiempo de Adviento, un grupo de personas sordas de la Pastoral del Sordo de la Diócesis Jaén se reunieron en la Basílica de San Ildefonso para celebrar juntos la cercanía de la Navidad.
La Eucaristía fue presidida por el director del secretariado, D. Germán García Aguilera, quien pudo presentar a la comunidad sorda a todos los asistentes.
D. Germán explicó que la discapacidad de las personas sordas no se ve, por lo que con frecuencia, no llegamos nunca a ponernos en su lugar, y así poder comprenderlos mejor.
En la homilía, el sacerdote hizo un repaso del camino del Adviento, reflexionando sobre las actitudes fundamentales e ideas principales que la Pastoral del Sordo ha ido proponiendo para cada semana de Adviento.
El tiempo del Adviento es un tiempo de gracia para poder llegar a experimentar de verdad lo que significa ser cristianos auténticos y no solo por costumbre.
Durante la primera semana, desde la Pastoral del Sordo se propuso no hablar mal de nadie nunca y al contrario pensar en lo bueno de las personas y eso si decirlo y publicarlo pero solo lo bueno, lo malo al Sagrario.
La segunda semana de Adviento la propuesta fue que se notara en «nuestras obras en nuestra forma de ser y de actuar los frutos de nuestra conversión», es decir de nuestra amistad con Dios. Como decía San Francisco predicando siempre el Evangelio y si fuese necesario también con palabras.
El Domingo de Gaudete, la propuesta fue la alegría: «que nadie se despida de nosotros sin que lo hayamos hecho estar más felices». Y como Juan el Bautista preparar el camino del Señor nos toca a nosotros también ser apóstoles ser de los que invitan a otros a vivir su fe mejor: ser activos en la fe en la evangelización.
La cuarta semana, se centró en el Emanuel qué significa «Dios con nosotros». Por lo que desde la Pastoral se invita a reconocer a meditar «cómo está Dios presente en nuestras vidas y pedirle al señor que nos aumente la fe y la capacidad de descubrirlo», y así poder llegar a celebrar la fiesta de que efectivamente Dios nace cada día y eso lo podemos ver notar y sentir.
La Eucaristía estuvo interpretada en lengua de signos por Laura Ponce de Linares y Carmen de Torredonjimeno, voluntarias de la Pastoral del Sordo de la Diócesis.
Tras la celebración eucarística, los miembros de la Pastoral y muchos de los que asistieron a San Ildefonso pudieron saludarse y coincidían en que había sido una Misa muy entrañable y emocionante, que nunca habían caído en la cuenta de pensar en las personas sordas y en su dificultad para poder celebrar los Sacramentos.
Después pasaron por el Camarín de la Virgen de la Capilla y pudieron rezar a María y encomendarse a Ella. A continuación visitaron el Belén que la Cofradía de la Patrona de Jaén tiene instalado en su Casa Museo.
Finalmente, los salones parroquiales acogieron una convivencia en la que participaron los miembros de la Pastoral del Sordo.
La comunidad de San Ildefonso se mostró especialmente acogedora con las personas sordas que le visitaron.
Damos gracias a Dios por tanto bien.
Miembros de la Pastoral del Sordo de Jaén
