El sábado, día 29 de octubre, tuvo lugar la celebración de la Asamblea de la CONFER Diocesana en el Seminario, a la que estaban convocadas las comunidades religiosas de nuestra provincia.
Dió comienzo con el saludo y bienvenida de la Presidenta, la Hna. Mª José de Castro, Hija de Cristo Rey, que agradeció la presencia de los religiosos y religiosas y recordó los objetivos y atribuciones de la Asamblea, animando e impulsado la intercongregacionalidad, con la riqueza de todos los carismas.
A continuación se invocó al Espíritu en la oración, pidiendo que nos convoque a la unidad y transforme nuestras manos para dar, que el Espíritu fecunde con ternura nuestro ser.
Terminando la oración se unió a nuestra Asamblea el Sr. Obispo, Don Amadeo, que saludó a todos los presentes, y preguntó por los fines de la organización. Brevemente la Presidenta los expuso resumiéndoles en el servicio y la animación de la vida consagrada, facilitando el diálogo y la comunión con los diversos miembros que la componen y con la Iglesia local.
Acto seguido, el Sr. Obispo intervino manifestando que en cada Diócesis la vida consagrada tiene su hueco y el Obispo tiene la obligación de valorar el trabajo de las religiosas como una aportación que enriquece la vida de la Iglesia diocesana. “Del mismo modo que la Iglesia diocesana tiene que consideraros e integraros, vosotras de alguna manera, tenéis que vivir en una Iglesia en comunión y corresponsable”.
“Sois parte de la Iglesia de Jaén. Sentíos muy diocesanas”. Aludiendo a las palabras que el Papa dirigió a los Obispos quiso recordar “que la vida consagrada es un don para la Iglesia. Hay que preguntarse qué hacemos para promover las vocaciones y los diversos carismas”.
Haciendo eco del Año de la Vida Consagrada recordó uno de los mensajes: el cultivo de la dimensión profética y que ésta se expresa con la propia vida y el propio carisma. “Tenéis la obligación de tirar de la Iglesia para arriba y de decirnos a todos «no podemos vivir en una dimensión plana». Tenemos que ver, sin perder la identidad, como acercarnos a los que están sedientos de Dios”.
Nos animó a conjugar la libertad de nuestros carismas con la catolicidad, y a seguir cultivando y fomentando las buenas relaciones y el diálogo entre nuestras comunidades, que nos enriquece en conjunto como vida consagrada.
Terminó diciendo que para ser una Iglesia en salida hay que tener predisposición para la movilidad y en eso la vida consagrada es experta.
Después se abrió un dialogo y se compartió distintas experiencias de las congregaciones.
Tras un breve descanso, la Asamblea continuó, con la aprobación de la memoria de actividades y la memoria económica, para pasar a una breve información de cada una de las responsables de las distintas vocalías, para dar a conocer las líneas de actuación. Intervinieron las Hnas. Isabel Moreno y Carmen Sánchez, de la Vocalía de Sanidad y Mayores; la Hna. Carmen Fernández, como representante del DAS (departamento de acción Social); la Hna. María Teresa Ruiz, de Pastoral Vocacional; y la Hna. Encarnación López, administradora y responsable de las relaciones de la delegación de Migraciones y responsable del Proyecto Candela de Cáritas.
Por último, la Hna. Mª José de Castro presentó los objetivos y plan de acción para este año, entre los que destacan:
– Aumentar el número de religiosos/as comprometidos con la realidad social de nuestra provincial.
– Potenciar y cuidar las relaciones con las Instituciones eclesiales y civiles que trabajan y defienden la dignidad de todos los hombres.
– Participar en la campaña Enlázate por la justicia; SI cuidas el planeta, combates la pobreza.
– Citando la Encíclica “Laudito Sí” que nos interpela a mirar la realidad con los ojos de Dios y a escuchar tanto el clamor de la tierra como el clamor de los pobres… Ese grito sube hasta Dios, Padre de la Vida, y nos invita a cada uno de nosotros a abrir también los oídos, transformar la realidad y ser fieles a su proyecto Creador…
– Se propuso a la Asamblea la aprobación de un Proyecto de atención y de acogida a jóvenes a partir de 17hasta los 21 años, que fue aprobado por unanimidad.
Concluyó la Asamblea manifestando: “… porque Dios tiene para todos y cada uno de nosotros, un proyecto de Amor, unamos nuestros esfuerzos y nuestras manos para hacer realidad la presencia y humanidad de la Vida Consagrada”.
Hna. Mª José de Castro
Presidenta de CONFER
