El misionero de la Consolata, Andrés García, que en la actualidad desarrolla su misión pastoral en Venezuela, se reunió con el Obispo de Jaén, Don Amadeo Rodríguez Magro, para detallarle su actividad en este país.
Don Amadeo recibió con alegría este encuentro y conoció de cerca la labor, que como misionero, desarrolla Andrés en el Delta Amacuro, al este. Acompaño al pueblo warao en el Municipio Antonio Díaz, en plena selva venezolana.
En una zona bastante deprimida, con casi nulos recursos, lleva la Palabra de Dios y la esperanza a tantas familias que pasan necesidades materiales. Para muchos de ellos su contacto con el misionero es también su primer conocimiento de Jesús de Nazaret, y durante los últimos meses muchos de sus vecinos han recibido algunos sacramentos como el bautizo y la comunión.
El misionero, que este año ha cumplido su vigesimoquinto aniversario de ordenación sacerdotal, explica que si es ya es de emergencia humanitaria la situación de Venezuela, ésta se agrava potencialmente en tierras de misión como en la que él está destinado por su comunidad.
Ahora, que pasa unos días de descanso en Jaén, está dedicándose a llevar la experiencia de misión en Venezuela a parroquias, Manos Unidas… En breve, regresará a llevar la alegría del Evangelio a los habitantes de la selva venezolana.
