El día 6 de Febrero, un grupo de cerca de 400 personas, muchas procedentes de países en los que hay conflicto, persecuciones y violaciones de derechos humanos, intentó llegar a territorio español a través de la frontera de Ceuta con Marruecos.
Tras el rechazo violento por parte de la Guardia Civil, que utilizó para ello gases lacrimógenos y pelotas de goma, tal y como ha reconocido el propio cuerpo policial, hasta 11 personas han fallecido en la frontera marítima con Marruecos, donde prosigue la búsqueda de otras posibles víctimas.
Estos hechos ponen de relieve una vez más, las prácticas policiales de rechazo en frontera, que violan derechos básicos de las personas, así como las consecuencias de una política migratoria obsesionada con el blindaje de las fronteras por encima de cualquier consideración de tipo humanitario y que impide el acceso a la protección internacional a potenciales personas refugiadas.
Esta tragedia es una consecuencia más de la política migratoria europea y española. No podemos permitir que sucesos como este y como el de Lampedusa el pasado mes de octubre donde más de 300 personas, perdieron la vida en un naufragio se vuelvan a repetir.
Con el Papa Francisco, repetimos:
«Muchos de ustedes son musulmanes o de otras religiones; provienen de diferentes países, de diferentes situaciones. Somos diferentes: no debemos tener miedos de las diferencias. La hermandad nos hace descubrir una riqueza, un regalo para todo el mundo. Defender. Servir, acompañar, también significa defender, significa tomar partido por los más débiles. Cuántas veces levantamos la voz para defender nuestros derechos, pero ¡cuántas veces somos indiferentes a los derechos de los demás! ¡Cuántas veces no sabemos o no queremos dar voz a la voz de quien –como ustedes- han sufrido y sufren; a quienes han visto pisotear sus propios derechos, a quien ha sufrido tanta violencia, que se ha reprimido incluso el deseo de tener justicia!»
Papa Francisco en su visita Centro de Refugiados Astalli. Roma. Septbre 2013
Ante esta situación, las organizaciones abajo firmantes, exigimos el establecimiento de procedimientos claros que prioricen el deber de socorro y el respeto de los derechos humanos de las personas que intentan llegar a nuestro país.
Asimismo pedimos la apertura de una investigación sobre lo sucedido e instamos a la creación de una comisión parlamentaria que investigue de forma inmediata y urgente las prácticas llevadas a cabo en el control de las fronteras de Ceuta y Melilla, como las expulsiones ilegales reconocidas por el Ministro del Interior.
El próximo miércoles, 19 de febrero, además, se celebrará, a las 19:00 horas en la Plaza de la Constitución, el habitual Círculo de Silencio, en este caso especialmente por las muertes de los 15 inmigrantes en Ceuta.
Secretariado Migraciones
HOAC
Pastoral Obrera
Proyecto Rajab. IT- Jaén
