El domingo 23 de octubre, Jornada Mundial de las Misiones (DOMUND), a las 6 de la tarde, se ha celebrado en la Catedral de Jaén el envío de los catequistas de la Diócesis de Jaén por nuestro Obispo, Don Sebastián Chico Martínez. Estaban invitados todos aquellos/as que acompañan a otros creyentes en un proceso de fe, sean niños, jóvenes o adultos.
En esa Misa de envío han participado alrededor de 400 catequistas, pertenecientes a más de 60 parroquias de la Diócesis, además del Vicario Episcopal de Jaén y Mágina, el Delegado de Primer Anuncio y Catequesis; y algunos párrocos que acompañaban a sus catequistas.
La celebración del envío ha tenido tres momentos destacables:
En primer lugar, la homilía del Obispo en la que ha reconocido la importancia para la Iglesia del ministerio del catequista y ha dado varias veces las gracias a los catequistas por su dedicación. En concreto don Sebastián ha hecho referencia y ha comentado parte del Discurso del Papa Francisco en el III Congreso Internacional de Catequesis el pasado 10 de septiembre: «Os lo ruego: no os canséis nunca de ser catequistas. No de la catequesis «sermoneadora». La catequesis no puede ser como una lección escolar, sino que es una experiencia viva de la fe que cada uno de nosotros siente el deseo de transmitir a las nuevas generaciones. Por supuesto, debemos encontrar los mejores medios para que la comunicación de la fe se adecue a la edad y a la preparación de las personas que nos escuchan; sin embargo, el encuentro personal que tenemos con cada uno de ellos es decisivo. Sólo el encuentro interpersonal abre el corazón para recibir el primer anuncio y desear crecer en la vida cristiana con el mismo dinamismo que permite la catequesis. El nuevo Directorio para la catequesis, que se os ha entregado en los últimos meses, os será muy útil para entender cómo seguir este itinerario y cómo renovar la catequesis en las diócesis y parroquias. No olvidemos nunca que la finalidad de la catequesis, que es una etapa privilegiada de la evangelización, es llegar al encuentro con Jesucristo y dejar que crezca en nosotros.» (Papa Francisco).
El segundo momento destacable fue el de la bendición y envío de los catequistas. Tras la homilía, los catequistas se pusieron de pie y se acercó al presbiterio el coordinador de catequesis o un representante de cada parroquia con una vela encendida. Todos los catequistas, en respuesta a las preguntas del Obispo, profesaron la fe y renovaron su compromiso de formarse y de realizar la tarea con fidelidad y apoyados en la gracia del Señor. Especialmente emotivo fue el momento en que los catequistas de rodillas recibieron la bendición del Obispo y la Palabra de Dios.
El tercer momento significativo fue el saludo personalizado a cada catequista por parte de Don Sebastián, entregando un símbolo del envío: un saquito de sal y una velita que les recordará su misión de ser sal para salar y luz para alumbrar.
Delegación de Primer Anuncio y Catequesis
Galería fotográfica: «Envío diocesano de catequistas»
