Domingo XXXIII, Tiempo Ordinario, Ciclo C

Domingo XXXIII, Tiempo Ordinario, Ciclo C

– Mal 3, 19-20a. A vosotros os iluminará un sol de justicia.
– Sal 97. R. El Señor llega para regir los pueblos con rectitud.
– 2 Tes 3, 7-12. Si alguno no quiere trabajar, que no coma.
– Lc 21, 5-19. Con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas.

Nos acercamos al final del Tiempo Ordinario, y este domingo la Palabra de Dios nos invita “literalmente” a la perseverancia. Pero veamos. 

Dirigiendo la atención hacia el bellísimo Templo (que para el judío era la presencia misma de Dios), Jesús lanza una profecía sobre su futuro: “no quedará en pie”. Y así sucedió. En agosto del año 70 d.c. una considerable revuelta lo arrasará. Pero en paralelo y fiel a su estilo, el Señor está planteando -además- la realidad del mundo futuro, el escathón, y les enseña cuáles serían las señales que lo precederán: guerras, grandes terremotos, peste, hambre, graves fenómenos, señales en el cielo… juntamente con persecuciones que nos llevarán a la cárcel. Incluso nuestros propios familiares se encargarán de ello, y tal vez arrancándonos la vida.

Pero el Señor lo sustenta con su Amor: esto servirá para que demos testimonio de Él… pero sin dejar de reconfortarnos: recibiremos su asistencia ya que podremos defendernos con una elocuente sabiduría imposible de ser contradicha.

El odio hacia nosotros es por odio a Él, a su dulce nombre. Y porque su dulzura es verdadera, nos consuela: ningún pelo de la cabeza se nos perderá: ¡Vaya promesa, gracias Señor! No obstante nos recuerda hacer los deberes: Perseverar es nuestra tarea para salvar el alma.

He aquí la cuestión. En griego, hupomoné (el lenguaje de los evangelios) el término significa: aquel que no busca escapar del peso de las pruebas de la vida. Ser perseverante significa pues, ser paciente, firme, constante y aguantador. Es el trazo característico de la persona que no se desvía de su fin último en la vida ni de su fe, a pesar de las contrariedades y sufrimientos.

En definitiva, Jesús nos alienta -vaya que sí lo hace- a que apostemos por Él, confiando en su dulce nombre, pues no nos decepcionará. 

Amén. 

Secretariado Diocesano de Pastoral de Sordo/sordo-ciegos de Huelva.

La entrada Domingo XXXIII, Tiempo Ordinario, Ciclo C se publicó primero en Diócesis de Huelva.

Ver este artículo en la web de la diócesis

Contenido relacionado

📖 Reseña literaria: ‘El loco de Dios en el fin del mundo′, de Javier...

En la lista de los seleccionados para el premio Médicis extranjero...

La Renovación Carismática Católica de Huelva celebrará su Retiro de Adviento el próximo 22...

El Colegio Diocesano «Sagrado Corazón de Jesús» de Huelva será el...

La Diócesis de Huelva celebrará este próximo jueves la festividad de San Leandro

La Diócesis de Huelva celebrará este jueves 13 de noviembre la...

Enlaces de interés

ODISUR
Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.