La idea de crear una cocina social en Punta Umbría, mejor que un comedor, surgió en el consejo pastoral de las parroquias de la localidad costera, acogiendo una propuesta de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paul. Aprobada por unanimidad, se encargó al párroco y a las hermanas dar los pasos oportunos en esa dirección.
Lo primero fue crear una asociación con tal fin, que habría de encargarse de la gestión y funcionamiento de la cocina. Así, el 4 de mayo pasado se constituyó la Asociación No Gubernamental «Comparte tu Pan», para que ante la necesidad de muchas familias de la localidad, acuciadas por la crisis económica y la falta de trabajo, promueva, ponga en funcionamiento y gestione una Cocina Solidaria con el objeto de garantizar a dichas familias, con problemas económicos, las necesidades básicas de alimentación. Así reza en el acta de fundación, firmada por las Hijas de la Caridad, miembros del Consejo Pastoral y Cáritas parroquial de Nuestra Señora del Carmen y Santa María del Mar y algunos ciudadanos a título personal.
Conscientes de que, en nuestra sociedad, para la solución de los problemas que la acosan, no sólo hacen falta recursos, sino también una verdadera solidaridad de la que brote una convivencia social pacífica, sólida y estable, este colectivo ha tomado la iniciativa para generar una alternativa como respuesta a la situación social, aunque también reconocen que no es más que un paliativo, pues «la verdadera solución está en un orden social más justo, en el que el progreso humano sea más valorado que la acumulación de riqueza, los bienes cumplan su función de servir a todos y los problemas se resuelvan desde la justicia y el respeto a los derechos humanos».
El título de la asociación, Comparte tu Pan, está tomado de Is 58,7 («Comparte tu pan con el hambriento») y nos trae el eco de la cita evangélica en la que Jesús nos recuerda que lo que hagamos con éstos, hermanos nuestros, se lo hacemos a Él mismo (Mt 25, 35: «tuve hambre y me disteis de comer»). En definitiva, una opción apropiada para prestar la ayuda necesaria respetando la libertad y la dignidad de los beneficiarios.
En el camino realizado para llevar a cabo esta iniciativa, el segundo paso ha sido conseguir un local y, para ello, los precursores de esta idea han acudido a los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Punta Umbría que, apoyándolos y dispuestos a colaborar, en muy poco tiempo le han asignado un local no utilizado antes. A partir de esta concesión, se elaboró un proyecto que, aprobado por el Colegio de Arquitectos de Huelva, está siendo llevado a cabo por monitores y jóvenes acogidos en el Centro Naim, otro de los proyectos sociales de las parroquias que acoge a jóvenes en proceso de desintoxicación.
Paralelo a esta acción se han formado los equipos de trabajo que se encargarán de la elaboración de la comida y de su distribución; también se está preparando el curso para lograr el permiso de manipulación de alimentos para todos ellos.
El proyecto, que prevé atender a unas 60 familias de la localidad (en torno a 250 personas), se pondrá en marcha a comienzos de año. Esta acción se suma a otras que vienen llevándose a cabo por parte de los servicios sociales y por cáritas parroquial como es el reparto de alimentos y la entrega de vales.