Amor, alegría, esperanza, ilusión y fe son algunas de las palabras que durante la semana pasada se han ido escuchando en cado uno de los lugares de Huéscar por donde han estado presentes los 30 jóvenes de Misión País.
Ha sido una semana intensa, en la que prácticamente no se ha parado, pues estos jóvenes sabían a lo que venían, que no era otra cosa que ha compartir su fe, incluso visitando a la comunidad puerta a puerta.
Se han hecho presentes en residencias, colegios, institutos, centros de día… Han estado en catequesis, han participado diariamente en la Eucaristía, recibieron formación, acompañaron a los enfermos y un largo etc. Y, además, recorrieron parte del Camino Espiritual del Sur, junto con los niños de primero de la ESO del Instituto Alquivira.
También, un día subieron a la parroquia de San Clemente, donde visitaron el barrio, estuvieron en catequesis, en las celebraciones de la santa Misa, en la exposición del Santísimo y en el rezo del santo rosario. Ellos se quedaron encantados al escuchar los cantos de la Hermandad de Ánimas en la Eucaristía
Uno de los momentos más emotivos vividos, fue el “adoremos”, que tuvo lugar el viernes 7, cuando, por medio de cantos, silencios, el testimonio de una joven de misión país que toco el corazón de todos, se pudo palpar la presencia de Dios. Fueron dos horas de encuentro con Dios, que sigue infundiendo fuerza y luz a sus vidas. Es en momentos como este, de silencio e intimidad, donde nace el fuego que lleva a estos jóvenes a visitar colegios, institutos, residencias, centros de día, hogares…
Desde la parroquia de Santa María queremos agradecer a Misión País su estancia estos días en medio de nosotros. También, a todas las personas que han colaborado, a las distintas hermandades que les han abierto sus puertas, al ayuntamiento del municipio que tan bien se ha portado con los jóvenes estando muy cercano a ellos y, en general, a todos los oscenses, por su generosa acogida. Gracias a Ángeles Monjo y Jaime Lizarraga, los responsables de prepararlo todo, sin olvidar al padre Jesús Zurita, sacerdote que los ha acompañado.
¡Gracias! ¡Muchas gracias, queridos jóvenes, por habernos regalado unos días tan especiales e intensos! Gracias por haber querido pasar una semana acompañándonos en vez de estar de fiesta al terminar los exámenes de enero, y dedicarnos esos días de descanso, antes de volver a las clases, en los que hemos compartido el amor de María y de su Hijo Jesús.
José Antonio Martínez
Párroco de Huéscar
