Un año más, la parroquia de Huéscar cumplió con la tradición de realizar las rogativas por los campos y la lluvia a las Santas Patronas, Alodía y Nunilón. Durante estos días se bendicen los campos y se pide la lluvia, tan necesaria para que las cosechas sean fructíferas.
Las rogativas tienen lugar en cuatro días distintos. El primero de ellos coincide con el día de San Marcos, cuando las Patronas son llevadas a la ermita de la Soledad.
Los tres días siguientes fueron el lunes dos de mayo, en el convento de las Madres Dominicas; el tres de mayo, en la residencia de mayores San Jaime; y, por último, el miércoles cuatro de mayo, que tuvieron lugar en la iglesia de Santiago.
A estas oraciones siempre acude un gran número de fieles, que acompañan a las patronas y las honran con sus cantos y sus oraciones.
José Antonio Martínez
Párroco de Santa María, de Huéscar.