Antonio Jesús Marcos es miembro del equipo del Secretariado de Infancia y Juventud de la Diócesis de Guadix. Él ha sido uno de los cinco accitanos que han viajado hasta Zaragoza para participar en el Primer Encuentro de Equipos de Delegaciones Diocesanas y Movimientos Nacionales de Pastoral, celebrado del 28 al 30 de marzo. A su llegada a la Diócesis de Guadix nos ofrece su testimonio.
Estos días en Zaragoza hemos podido vivir la experiencia de conocer a Jesús vivo y compartirlo con los jóvenes de todas las diócesis.
Hemos aprendido otras formas de poner en práctica el primer anuncio y, a la vez, profundizar en los métodos y actividades que, hasta la fecha, estábamos realizando.
Han sido días para compartir, rezar, reflexionar y, en definitiva, conocer a Jesús como un amigo y poder hablar de Él con otros jóvenes, como el amigo que nunca nos falla y el que puede ser, cada vez más, el de otros muchos jóvenes.
Las formas de dar a conocer a Jesús y de realizar un primer anuncio son muy variadas, pero con una base firme, donde la fe toma el papel principal, apoyando esta fe en el testimonio de vida. Nos olvidamos un poco de las normas y dejamos paso al sentimiento, al amor y a las ganas de evangelizar y de dar a conocer a ese amigo que se llama Jesús.
Sigue habiendo tantos pies que lavar, sigue habiendo tanta oscuridad que iluminar, tantas barreras que romper… pan y vino para el pobre quiero ser… La humildad y la sencillez nos hace grandes y ser capaces, sin tambalear ni tan solo un segundo, de decir que Jesús vive y está ahí. Yo ya lo conozco y¿ tú?.
En definitiva, esa luz que nunca se apaga y que llamamos fe, esa fe nos convierte en agua, agua viva, en pastores, evangelizadores, pescadores de hombres. Pero para eso hay que ser luz. Así que seamos luz y prediquemos que somos amigos de un buen hombre, que se llama Jesús.
Antonio Jesús Marcos Soto
Secretariado de infancia y Juventud
Diócesis de Guadix