En la mañana del viernes, 24 de marzo, los orgiveños celebraron la Solemnidad del Santísimo Cristo de la Expiración. Una fecha muy señalada para la localidad en la que las conmemoraciones comenzaron con la celebración de la Eucaristía en la parroquia de Nuestra Señora de la Expectación presidida por Mons. Gil Tamayo.
El 24 de marzo es un día marcado en el calendario de todos los orgiveños, cada año las celebraciones en la Solemnidad del Santísimo Cristo de la Expiración engalanan las casas y balcones del pueblo que desde la semana anterior ya se prepara para este día con la celebración de la novena que ha tenido lugar en la parroquia de Nuestra Señora de la Expectación del 14 al 22 de marzo.
Previamente con la bajada del Camarín del Señor de la Expiración el jueves, 23 de marzo, la solemnidad el día 24, comenzó con la celebración de la Eucaristía al mediodía que este año contó con la presencia de Mons. Gil Tamayo y estuvo concelebrada por D. Manuel España y D. David Salcedo, ambos párrocos de Órgiva, entre otros miembros del clero diocesano.
En la celebración eucarística estuvieron también presentes este año los miembros de la asociación de personas discapacitadas Aprosmo que pudieron expresar en primera fila su devoción al Señor.
UN PUEBLO UNIDO
Durante su homilía, nuestro Arzobispo se refirió a la figura del crucificado a partir de la liturgia de la palabra proclamada en esa solemnidad en relación a la exaltación de la cruz. Destacó que es necesario vivir la fe en Cristo en la vida cotidiana, familia, trabajo, más allá de las procesiones y celebraciones. Por último resaltó la necesidad de “poner rostro a la cruz” en los enfermos y en los que sufren.
Para D. David Salcedo, la celebración del Cristo de la Expiración hace que “se respire lo que es el pueblo cristiano unido bajo una única devoción”. “Fue un día grande, participó mucha gente y el pueblo orgiveño disfruto de la presencia de nuestro Arzobispo. Muchos visitantes, peregrinos y devotos recibieron también el Sacramento de la Reconciliación y la bendición”, agregó.
Por la tarde tuvo lugar la esperada procesión del Cristo de la Expiración y María Santísima de los Dolores por las calles de Órgiva ante la mirada de fe y devoción de los vecinos y visitantes desplazados hasta esta localidad granadina para celebrar este día.
A lo largo de esta semana el Cristo estará expuesto en el templo parroquial para la veneración de los fieles hasta el próximo 1 de abril en el que tendrá lugar su subida solemne a su camarín.
María José Aguilar
Secretariado de Medios de Comunicación Social
