Con estas palabras, el Obispo ha alentado en la misa de inicio de curso a los alumnos del Centro de Magisterio «Sagrado Corazón».
El jueves 15, ha tenido lugar la misa de inauguración del curso académico 2015-2016 en el Centro de Magisterio «Sagrado Corazón». Una celebración que ha tenido lugar en la entrada principal del edificio y donde han estado presentes numerosos alumnos y profesores del mismo.
La celebración ha estado presidida por el Obispo y concelebrada por el Director Adjunto del Centro, Jesús Poyato, junto con los sacerdotes que sirven al mismo.
En su homilía, el pastor de la Diócesis ha comenzado recordando a Santa Teresa de Jesús, en este día en el que se celebra su festividad, como «un ejemplo de enseñanza, que ha sabido transmitir a todos el valor de la fe y la espiritualidad». Igualmente, ha recordado al alumnado que en este centro universitario católico, «no sólo tenemos que tener a Jesús como maestro y referente, sino que debemos saber que gracias a nuestra fe, vamos a ser maestros preparados para la vida y para aportar esa luz a la sociedad procedente de Dios». «Os estáis preparando para aportar a la sociedad un «plus», una enseñanza no sólo en las distintas materias de lengua o matemáticas, sino para la vida ofreciendo una visión cristiana de ella», ha afirmado.