La Virgen de la Consolación, patrona de Molina de Segura, ha recibido el cariño de los fieles durante sus fiestas patronales que han tenido lugar durante el mes de septiembre y que concluyeron el pasado lunes, con el regreso de la Virgen a su ermita. José León, párroco de Nuestra Señora de la Asunción de Molina de Segura, afirma que estas han sido «unas fiestas distintas que se han vivido con mucha cercanía y devoción».
Durante la mañana del sábado, la tradicional ofrenda floral a la Madre se realizó de una manera diferente a la habitual. Los fieles, que este año no vistieron el traje regional, pudieron acercarse de manera escalonada al templo. Además de llevar flores a la Virgen, en esta ocasión, también quisieron colaborar con donativos para Cáritas, reuniendo cerca de 900 kilos de alimentos no perecederos y 5.500 euros.
El domingo, el obispo de Cartagena, Mons. José Manuel Lorca Planes, presidió la Eucaristía en honor a Nuestra Señora de la Consolación. En su homilía, el prelado invitó a los presentes a recurrir a la Virgen en este tiempo de pandemia y a ponerse bajo su protección. Mons. Lorca Planes destacó «la belleza de tener como patrona a Nuestra Señora de la Consolación, que es protectora de los afligidos». El obispo pidió, además, su intercesión por todas las instituciones del municipio.