Las conclusiones de los cuestionarios realizados a jóvenes y agentes de pastoral juvenil, por parte de la Delegación, han sido entregadas al Obispo para la elaboración de su nuevo Plan de Pastoral.
El pasado mes de marzo comenzaba la consulta a jóvenes y agentes de pastoral juvenil lanzada por la Delegación de Pastoral Juvenil de la Diócesis de Cartagena. Unos cuestionarios con los que poder recopilar información sobre la acción catequética y formativa que se está llevando a cabo en las parroquias, así como la situación de los jóvenes hoy. Un documento cuyas conclusiones pudieran ayudar tanto a la Delegación para su trabajo diario como al Obispo en la elaboración de su nuevo Plan Pastoral.
“Ha habido una respuesta aceptable. Habríamos querido más, pero aun así es importante escuchar la voz de los jóvenes y tener el pulso de cómo es su situación actualmente”, explica el Delegado de Pastoral Juvenil, Antonio Jiménez Amor.
Desde todas las zonas pastorales de la Diócesis han llegado las respuestas a estas consultas que ayer se entregaron a Mons. José Manuel Lorca Planes. A él, en este documento, se le proponen cinco líneas para la elaboración de su Plan Pastoral, extraídas de las opiniones de jóvenes y agentes de pastoral: Buscar y elaborar recursos de catequesis permanente que ayuden a los itinerarios de fe; fomentar la cultura del testimonio cristiano; seguir trabajando con los agentes de pastoral juvenil; apostar por el trato personal y cercano con los más jóvenes; y favorecer la vida espiritual.
Opiniones de jóvenes y agentes
Según el cuestionario contestado por los jóvenes, estos indican que se sienten parte de la Iglesia aunque piden que sea más cercana, joven y misionera. Así mismo, demandan tener un mayor protagonismo en la pastoral evangelizadora y recibir una formación mayor. Y confiesan que necesitan un compromiso respecto a una mayor coherencia de vida y un aumento en su vida espiritual y celebrativa.
El Delegado de Pastoral Juvenil asegura que desde estas consultas también se piden más actividades que favorezcan una mayor experiencia de encuentro con Cristo y que se anime la vida en parroquias, movimientos y asociaciones.
La consulta a los agentes de pastoral juvenil se realizó con un método más elaborado, a través de tres premisas: ver, juzgar y actuar. Lo hicieron con textos del Magisterio de la Iglesia: textos del Papa Francisco, de San Juan Pablo II, del Proyecto Marco de la Conferencia Episcopal Española; también del Obispo de Cartagena, de sus cartas pastorales; e incluso del Evangelio. “De ese modo quería ver cómo está la situación actual de los jóvenes y de la pastoral juvenil, juzgarlo a la luz del Evangelio y sacar las conclusiones para actuar”, señala Jiménez Amor.
Para poder trabajar con los jóvenes es siempre necesario partir de su realidad, conocer su contexto vital y verse cercano a ellos, favoreciendo el crecimiento integral hacia la madurez del joven. Señalan estas conclusiones también la importancia de la transmisión de la fe desde la familia, la Iglesia y la escuela, en colaboración.
La entrega en el proceso de formación del joven es otro punto que también descubre esta consulta, que hacen falta más agentes de pastoral que quieran entregarse, y estos han de estar más formados.
También se piden más itinerarios y procesos que eduquen en la fe, no solamente que ofrezcan los sacramentos. Así como se pide continuar con actividades de primer anuncio para jóvenes, como es “Una luz en la noche” o los grupos Alpha.
Todos estos datos, entre otros muchos, son tomados por la Delegación de Pastoral Juvenil como línea a seguir para su trabajo con los jóvenes.