Además de la Eucaristía en la Santa Iglesia Catedral, Mons. Zornoza visitó el Santuario de Santa María de África, donde se postró ante la imagen de la Patrona.
La de hoy, ha sido una jornada eminentemente festiva en la Diócesis de Ceuta, pues en la misma ha hecho su presentación don Rafael Zornoza Boy como Obispo de Cádiz y Ceuta. La Santa Iglesia Catedral de Nuestra Señora de la Asunción acogía a las 12 horas una Santa Misa en la que Monseñor Zornoza ha estado acompañado del Nuncio Apostólico de su Santidad en España, Renzo Fratini, y del Arzobispo de Tánger, Monseñor Santiago Agrelo, además de la totalidad del clero ceutí, con el Vicario General de Ceuta a la cabeza, Francisco Correro Tocón, el Cabildo Catedral al completo, así como numerosos sacerdotes de diferentes diócesis de España. Autoridades civiles y militares estuvieron presentes en el acto, en el cual había una nutrida representación de la sociedad ceutí, y centenares de personas que llenaron la Catedral arropando así con su presencia la llegada del nuevo Obispo.
Era un día especial, y así lo demostraba el órgano del templo catedralicio, que daba como canto de entrada el himno oficial de la JMJ de Madrid 2011. Jornadas a la que Monseñor Rafael Zornoza hacía referencia durante su homilía, recordando además a los Santos Patrono de Ceuta, San Daniel y Compañeros Mártires. El himno a Santa María de África puso punto y final a la celebración religiosa, momento en el que numerosos feligreses quisieron dar personalmente la bienvenida a don Rafael, mostrando el señor Obispo muestras de afecto y cariño hacia los ceutíes.
Pero la presentación del nuevo Obispo dio más de si en una ajetreada mañana dominical. Momentos antes de la Eucaristía en la Catedral, Monseñor Zornoza visitaba el Santuario de Santa María de África para postrarse ante la venerada imagen, Patrona de los ceutíes. El rezo del Ángelus, la firma en el libro de honor de la Cofradía de Caballeros, Damas, y Corte de Infantes de Santa María de África y la visita al camarín fueron acontecimientos que se vivieron con gran emoción. Una visita al Palacio Autonómico y un almuerzo con el clero ceutí puso fin a una jornada histórica para todos los que conforman la Iglesia en la ciudad y obispado de Ceuta.