El obispo presidió la recepción del traslado del Pendón por la corporación municipal y la intervención del deán del Cabildo Catedral en la que pidió al Patrón constancia, fortaleza y movimiento para salir de la crisis.
La recepción del Pendón de la ciudad de Jerez por parte del Cabildo Catedral en la iglesia de San Dionisio Areopagita, trasladado por la corporación municipal en procesión presidida por la alcaldesa María José García-Pelayo desde el Cabildo Antiguo, abrió el acto en honor al patrón y en el aniversario de la restitución del culto cristiano en 1264.
Monseñor José Mazuelos Pérez, obispo de Asidonia-Jerez, ha presidido un acontecimiento cívico-religioso en el que la alocución del deán del órgano catedralicio, Antonio López Fernández, ha situado en el terreno histórico una cita que, sin embargo, puede trascender desde los propios signos del escudo de la ciudad para alumbrar los valores con los que afrontar los tiempos difíciles que vivimos.
«Un pueblo que no conoce su historia no puede mirar con claridad su futuro», dijo López pidiendo a San Dionisio, en base al lema del Pendón, «constancia para superar la falta de trabajo y el cierre de empresas, fortaleza para que juntos y con la responsabilidad de todos podamos superar las adversidades y con esperanzas luchar por un futuro mejor y continuo movimiento para que podamos ir superando las metas que nos propongamos».
Luego tuvo lugar el canto del Te Deum, a cargo de la Coral de San Dionisio Areopagita dirigida por Francisco Marín. Con ello se rindió acción de gracias a Dios por todos los beneficios otorgados a la ciudad. Concluido este acto cívico-religioso, e inmediatamente después de la marcha del Pendón de Jerez se celebró la Eucaristía dedicada al patrón.