La parroquia de san Pío X del barrio del Zapillo, en la capital almeriense, acogió en la mañana del sábado el retiro de cuaresma de la Adoración Nocturna. Concluyó en torno al mediodía con la celebración de la misa.
El Consejo diocesano intenta que estos retiros sean unas horas de intensa oración y de adoración de Jesús sacramentado, así como un momento de unión para los fieles de esta asociación.
En él han participado alrededor de medio centenar de adoradores e invitados, pues están abiertos a todos los fieles que quieran conocer la espiritualidad de la ANE. Además, ha habido a disposición de los fieles sacerdotes para poder administrar la confesión.
La liturgia ha estuvo a cargo del turno de la parroquia del Zapillo y las meditaciones, en torno al misterio del sufrimiento y las actitudes básicas para la Cuaresma, corrieron a cargo del consiliario diocesano.