Han pasado 50 años desde el inicio del Concilio Vaticano II, pero no es ni mucho menos un evento del pasado. «El Concilio Vaticano II es una realidad que todavía está pasando, que tenemos que vivir y construir todos juntos», apuntó Juan Antonio Paredes Muñoz, profesor del Seminario diocesano de Málaga y del Instituto Superior san Pablo, durante su intervención en el acto académico que acogió el Seminario diocesano de Almería, con motivo de la festividad de santo Tomás de Aquino.
Tras la Eucaristía que presidió el Obispo de Almería, monseñor Adolfo González Montes, profesores del Centro de Estudios Eclesiásticos, seminaristas, junto con otros presentes, asistieron en el salón de actos del Seminario a la ponencia sobre la «Recepción del Concilio Vaticano II en el Año de la Fe. Fortalecer la Fe de los cristianos», que impartió Paredes Muñoz.
La ponencia contempló, en primer lugar, el pasado anterior del Concilio con gratitud, en su contexto sociocultural durante el pontificado de Pío XII; en segundo lugar, se detuvo en el acontecimiento en sí, protagonizados por Juan XIII y Pablo VI, los padres conciliares, los documentos y la vibración de la sociedad ante el acontecimiento. Para terminar, se constataron los resultados, su aplicación, con el fin de aprovechar el jubileo del Año de la Fe propuesto por S.S. Benedicto XVI para la Iglesia.
