
La Parroquia de Nuestra Señora de Montserrat en la mañana del martes, día 20 de junio, se vistió de alegría y fiesta para dar gracias a Dios por el curso escolar 2022-2023 que en estos días se clausura comenzando el periodo vacacional del verano para escolares y la Comunidad educativa.
Presidida la Santa Misa por el párroco, Manuel Pozo Oller, fue acompañado en el altar por el diácono permanente, Joaquín Espino Parra, colaborando en la liturgia un buen grupo de niños y adolescentes en la oración de los fieles, moiciones y cantos. En las ofrendas los escolares presentaron un reloj signo del tiempo que Dios nos da para hacer el bien y aprender a crecer como personas; un cartel con el que se pone en manos del Señor el próximo Capítulo general de las Hermanas de la Congregación de la Inmaculada Niña bajo el signo de la esperanza; una maceta florida como signo del trabajo realizado y los frutos que ahora se recogen. El pan y el vino para la eucaristía lo acercaron al altar unos padres en nombre de la AMPA.
En la homilía el presidente de la celebración animó a los presentes a dar gracias por tantas personas que nos acompañan en nuestro crecimiento intelectual, humano y espiritual. Recordó cuantos niños y adolescentes no tienen los medios que tenemos en España e invitó a aprovechar el tiempo “para colaborar con el Señor en la obra de la Creación que no está acabada y que nos sorprende siempre”.
Los cantos, bellamente interpretados por los asistentes, fueron dirigidos por el profesor José A. Guirado Berbel. A la celebración asistieron la directora académica, Mª del Pilar Callejón Gallego, la jefa de estudios, Hna. Dunia Abdelaziz y representantes de la Comunidad religiosa, Hna. María Silvana Nunes de Oliveira, junto al resto de profesores y profesoras del Centro y un buen grupo de padres y abuelos.