En Cañete la Real, trece hermanas de diferentes países (España, Madagascar, Kenia y Perú) y con edades entre los 21 y 91 años viven en el Monasterio del Santísimo Sacramento.
La madre priora del Monasterio del Santísimo Sacramento, de Cañete la Real, sor María Dolores Garrido, señala que la fundación del monasterio, en el año 1662, fue obra del Dr. D. Melchor Rojas y Saavedra, Rector de la Universidad de Osuna. Para ello hizo testamento en 1645, manifestando ser de su voluntad que fuera un convento de monjas de clausura de estricta observancia y que se titulara del Santísimo Sacramento, cediendo para tal empeño unas casas de su propiedad en el centro mismo de la población. El arzobispo de Sevilla, Fr. Pedro de Urbina, y el Provincial de los Carmelitas andaluces, P. Fr. Eustasio Gutiérrez, otorgaron la licencia de fundación. Vinieron como fundadoras seis monjas de singular virtud, del Monasterio de Villalba del Alcor, y dos de la comunidad de Antequera. Se tomó posesión del convento el domingo 10 de diciembre de 1662, instalándose el Santísimo Sacramento. “Desde entonces hasta la fecha, hemos pasado por muchas y graves circunstancias, estando varias veces a punto de extinguirse… Pero se ha visto la mano protectora de Dios, que quiere mantener en su pueblo de Cañete este jardín escondido donde deleitarse” – señala la madre priora–. Entre las religiosas virtuosas y ejemplares que han florecido en el monasterio, se distingue la venerable madre Josefa de San Florencio.
La vida diaria dentro del monasterio está perfectamente organizada: Oración, liturgia, lectura espiritual, formación inicial y permanente, recreo, descanso y el trabajo de elaboración de dulces artesanales y de bordados.