Mons. Javier Martínez presidió la Eucaristía del Voto a San Cecilio, que tradicionalmente se celebra el primer domingo de mes, el siguiente al 1 de febrero, fiesta litúrgica de San Cecilio en Granada.
Como es costumbre en este día, la comitiva municipal partió hacia la Abadía, para participar a las 12 en la Eucaristía que se celebró en la iglesia de la Abadía.
En el ofertorio, los comisarios municipales, que este año han sido los concejales Miguel Ángel Fernández Madrid y Antonio Granados, entregaron al Arzobispo la ofrenda de la Ciudad a San Cecilio, una rosa roja y una cajita con el incienso en lágrimas, que lleva inscrito “Granada honra a San Cecilio y fecha del año que corresponda”.
Mons. Martínez expuso en la homilía los orígenes de esta celebración: “Todos los años, el día de San Cecilio es una ocasión para dar gracias por la tradición de la que somos hijos, por la tradición cristiana, que independientemente de todas las leyendas, que tienen su explicación en su momento histórico y que tienen su contexto, no suponen ningún escándalo, que dieron lugar a los libros plúmbeos, y al origen, si queréis, de la Abadía. Lo cierto es que había una necesidad en aquel momento de generar una unidad en torno a la fe cristiana, y con una memoria, de que los orígenes cristianos aquí habían sido muy antiguos, repito independientemente de todas las leyendas que contienen los libros plúmbeos, es obvio que en el Concilio de Elvira, que es el primer concilio de la Iglesia del que se conservan las actas escritas y firmadas, participaron 80 obispos. Esto era la capital de una gran región, algunos de ellos venidos del sur de Francia, y todavía no había sido la Paz de Constantino, es decir que la Iglesia estaba todavía en un periodo de semiclandestinidad, lo cual indica una presencia muy, muy antigua en nuestro territorio”.
Al final de la celebración, el Arzobispo, en nombre del Romano Pontífice, dio la Bendición Apostólica con Indulgencia Plenaria a todos los fieles presentes en la Misa, ocasión para ganar el Jubileo con las condiciones habituales: confesión con verdadero arrepentimiento, comunión, y rezar por las intenciones del Papa. Después, el Arzobispo dio a besar a los presentes las reliquias de San Cecilio, primer obispo de Granada y mártir.
VISITA A LAS SANTAS CUEVAS
Mons. Javier Martínez, Arzobispo de Granada, y Francisco Cuenca, alcalde de la ciudad, visitaron las Santas Cuevas, acompañados de los comisarios sacromontanos y municipales, que depositaron los ramos de flores en el Horno de San Cecilio y en la Capilla de la Virgen de las Santas Cuevas, tras lo cual visitaron la Sala Capitular y el claustro superior de la Abadía.
ROMERÍA
Es tradición granadina en este día que el pueblo suba andando a la Abadía y se celebre la Romería de San Cecilio en el entorno de la Abadía del Sacromonte, donde las personas visitaron las reliquias del Patrón, en la iglesia, participaron en la Santa Misa y comiendo al sol habas, bacalao y salaíllas, tradición granadina para el día del Patrón. Del mismo modo, los asistentes disfrutaron de las actuaciones de bailes regionales a cargo de los grupos de Lancha de Genil y el Sacromonte, en la explanada del campo de fútbol que hay bajo la Abadía.
MARTIRIO DE SAN CECILIO
San Cecilio fue el primer obispo de Granada cuando, bajo la dominación romana, se llamaba todavía Illiberis. Fue uno de los que la tradición llama «varones apostólicos» enviados a España por San Pedro y San Pablo a predicar el Evangelio. Los otros seis son: Torcuato, Segundo, Indalecio, Tesifonte, Eufrasio y Hesiquio.
Entre 1588 y 1599 tuvieron lugar las apariciones en la torre Turpiana y en el Sacromonte entonces Monte de Valparaíso, de una serie de reliquias, entre ellas las cenizas de san Cecilio, también una lámina que indicaba que su martirio tuvo lugar en el monte Illipulitano en el segundo año del imperio de Nerón y los Libros plúmbeos.
A raíz de estos acontecimientos, se cambió la fiesta litúrgica de san Cecilio del 15 de mayo, fecha en que se celebraba junto a los otros seis varones apostólicos, al 1 de febrero, fecha del martirio según una de las láminas encontradas. San Cecilio es, desde finales del siglo XVI, venerado como patrono de Granada y de su Archidiócesis y su fiesta se celebra el 1 de febrero.
Rosa Die Alcolea