La comunidad de Virgen Madre, en Nueva Andalucía, ha vivido su edición del Belén viviente parroquial, que ha congregado a toda la feligresía, desde los más pequeños, principales participantes, a los más mayores, que acudieron a vivirlo en primera persona a pesar de la meteorología.
Los jardines de la parroquia fueron el escenario de este precioso encuentro en torno al nacimiento, ya próximo, del Señor. Más de 150 figurantes, desde pequeños a mayores, de la parroquia, catequesis, grupos y asociaciones locales dieron vida al Misterio de la Navidad a través de escenas que recorrían desde la Anunciación hasta la Huida a Egipto. La cita era el 13, a las 11.30 horas, y ni la lluvia pudo con ella.
En palabras de sus organizadores, compartidas en la web parroquial, «no fue una representación más: fue una catequesis vivida, pensada para los pequeños y sentida por los mayores. Niños convertidos en pastores, jóvenes dando vida a Jesús y a María, romanos, Herodes… una carpintería, una panadería, los animales, la llegada de los Reyes Magos. Todo sencillo, todo cercano, todo explicado con cariño por los altavoces para que nadie se perdiera el sentido de lo que allí estaba ocurriendo: Dios haciéndose niño. Y cuando llegó el momento del nacimiento, el silencio habló por todos. Las palomas blancas alzándose en el cielo fueron más que un gesto bonito: fueron un suspiro de paz, un recordatorio de por qué celebramos la Navidad y de lo que el mundo sigue necesitando».
En esta cita navideña se han recogido, también, por medio de los niños de catequesis, chuches para las familias acompañadas por Cáritas, tras una preparación previa del sentido de compartir. En la jornada ha llevado el peso fundamental la parroquia, con todos sus grupos y el párroco, Ramón Tejero, a la cabeza; ayudados por la Cofradía del Cristo del Perdón y Nuestra Señora del Dolor y la Esperanza y el Ayuntamiento de Marbella. La jornada se extendió en un ambiente festivo y de convivencia que estuvo acompañado por distintos grupos y artistas que compartieron sus talentos. Las actuaciones de los payasos Mimosín y Lolo para los más pequeños, el coro Son de Paz, música, actuaciones, puestos de artesanía, comida y juegos.
