Tras dos semanas repletas de cultos y actos en honor a Jesús Sacramentado, la ciudad de Baeza culminó estos intensos días de devoción con la celebración de la Octava del Corpus Christi, que tenía lugar el pasado domingo día 9 de junio.
Durante ocho días, las naves catedralicias acogieron cada tarde la celebración de la Santa Misa, que este año como novedad y con motivo del Año de la Oración, estuvo dedicada a diferentes movimientos e instituciones. En estos días participaron en la liturgia la junta administrativa de la Catedral de la Natividad; la Cofradía Sacramental de la Fervorosa; la Academia de Cabos y Guardias de la Guardia Civil de Baeza; los ministros extraordinarios de la comunión; la Cofradía de la Santa Cena, los niños de primera comunión de las tres parroquias de la ciudad y sus catequistas; la Archicofradía de la Virgen del Alcázar; religiosas de vida activa y grupos de oración.
Los sermones, con gran celo apostólico fueron pronunciados por D. Francisco Juan Martínez Rojas; José López Chica; D. Abel Rosa Román; D. Rogelio de Jesús Garrido Checa y Fray Antonio Ángel Sánchez, OCD.
Por su parte, la capilla musical corrió a cargo de Francisco Lázaro Perales, organista de la Catedral de Baeza, y el coro de la Academia de Cabos y Guardias de la Guardia Civil de Baeza.
El broche de oro llegaría en la tarde del domingo con la celebración de la baezana y a la vez solemne celebración de la octava del Corpus Christi. El pueblo de Baeza, de manera fervorosa, inclinó sus rodillas una vez más para adorar a Su Divina Majestad.
Fue una hermosa celebración cargada de solemnidad y amor a Jesús Eucaristía, presidida por Don Sebastián Chico Martínez, Obispo de Jaén, concelebrando el Cabildo Catedral, clero de la ciudad y sacerdotes hijos de Baeza.
Esta celebración, con un marcado sello avilista, contó no solo con la participación de los hijos de la Iglesia de Baeza, sino que cada año, más vecinos de localidades de la provincia se trasladan hasta Baeza para ser partícipes de esta Santa Misa.
La capilla musical estuvo en esta ocasión a cargo de MusicAlma, quienes con su música ayudaron a los presentes a rezar. No faltaron tampoco los movimientos eucarísticos de la ciudad y los niños tarsicios.
La celebración de la Santa Misa se prolongó con la exposición del Santísimo Sacramento y la posterior procesión por las naves y claustro del templo mayor.
Para sorpresa de todos los presentes, en el ocaso de la tarde de la octava del Corpus Christi la ciudad viviría un momento histórico en la Catedral, ya que Monseñor Chico Martínez, Obispo de Jaén, mandó leer el decreto por el que se aprueba el expediente de Coronación Canónica Pontificia de la Virgen del Alcázar, Excelsa Patrona de Baeza y protectora de su comarca.
Decenas de baezanos emocionados fueron partícipes en primera persona de este feliz momento cargado de grandes instantes: el anuncio del Obispo mediante la lectura del decreto; los aplausos una y otra vez prolongándose en las naves de la Catedral; las campanas del templo repicando en un atardecer que parecía sacado de un óleo; el abrazo de Monseñor Chico Martínez a Manolo Rascón, hermano mayor de Archicofradía de los Patronos de Baeza; y tantas y tantas caras de felicidad de baezanos, que por fin verán como se hace realidad este anhelo de generaciones.
José García Checa
Baeza
Galería fotográfica: «Octava del Corpus en Baeza»
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