La Casa diocesana de Espiritualidad “San Juan de Ávila” en la Yedra, después de un tiempo breve de rehabilitación y reforma, acogió una nueva tanda de ejercicios para sacerdotes, entre los días 5 al 10 de febrero.
Unos 23 sacerdotes, entre ellos nuestro Obispo Don Sebastián, hemos podido compartir estas jornadas de gracia y oportunidad que en medio del curso pastoral ha sido un verdadero aliento, no solo para cuidar nuestro ministerio sacerdotal, sino también para escuchar la Llamada de nuestro Señor, que siempre invita a sus pastores a pararse, estar con el Señor, escuchar su voz y retomar la Misión fortalecidos y enviados por el Espíritu Santo.
Los ejercicios espirituales han estado dirigidos, en esta ocasión, por D. Damián Picornell Gallar, sacerdote diocesano de Albacete, párroco de San Roque de Almansa y director del Instituto Teológico diocesano de Albacete, quien aceptó de forma repentina la invitación por parte de la Delegación del Clero a ofrecer esta tanda que estaba prevista ser dirigida por el Obispo de Zamora, D. Fernando Valera Sánchez, y que por circunstancias de salud no ha podido venir. Agradecemos de corazón la generosidad y el compromiso de D. Damián por haber aceptado estar con nosotros.
Después de estos días de oración, fraternidad y renovación damos gracias a Dios que nos llama a dar gratis lo que de Él mismo un día recibimos gratis, nuestras vidas y ministerio en el servicio al Pueblo de Dios. Así también le pedimos a la Virgen María, Madre de los Sacerdotes que siga cuidando de todo el presbiterio, especialmente de aquellos hermanos que más lo necesitan. Unidos, como Iglesia Diocesana, seguimos caminando.
Pepe Navarrete
Sacerdote diocesano