Cuidado de la naturaleza, defensa de los más vulnerables y nuevo estilo de vida.
El Anuario de la Compañía de Jesús 2015 está dedicado a la Ecología, entendida ésta como el problema de salvaguardar la creación. En sus páginas se analiza cómo los jesuitas han ido tomando conciencia progresivamente del problema ecológico, sobre todo a raíz de su última Congregación General 35 (CG 35) celebrada en 2008. El volumen presenta algunos ejemplos de cómo podemos actuar en concreto para limitar los daños que causamos al medio ambiente.
En la CG 35 la Compañía de Jesús tomó conciencia de que «El cuidado del medio ambiente afecta a la calidad de nuestra relación con Dios, con los otros seres humanos y con la misma creación. Afecta al centro de nuestra fe en Dios y nuestro amor a Él». Y particularmente explicitó que el modelo de explotación de las fuentes de energía y otros recursos naturales está afectando particularmente a los pobres: «Para escuchar, una vez más, el llamamiento a promover relaciones justas con la creación, hemos sido movidos por el clamor de los que sufren las consecuencias de la destrucción medioambiental».
Cultura de la sobriedad compartida
Dos artículos iniciales presentan el tema en el Anuario y abordan rasgos espirituales de la Ecología donde se contemplan los tres aspectos ecológicos que preocupan a los jesuitas:
1-El cuidado de la naturaleza: los jesuitas consideran que porque somos sus «cuidadores» debemos conocerla, quererla y protegerla.
2-La defensa de los más vulnerables: las comunidades más pobres y las generaciones futuras, siendo las poblaciones que menos han contribuido al deterioro del medioambiente son, sin embargo las más expuestas a los desastres ecológicos y las que más sufren sus efectos.
3-Una propuesta de un nuevo estilo de vida: «el modo de vida consumista de los países que solemos decir desarrollados, así como el de las poblaciones ricas de estos países, no puede alcanzar a todos, porque el planeta no dispone de tantos recursos» y por eso necesitamos una «cultura de la sobriedad compartida», respetuosa con la creación y solidaria con los vulnerables.
A continuación el Anuario presenta experiencias que la Compañía ha llevado cabo o está realizando en distintas partes del mundo. Desde África se narra cómo los jesuitas jóvenes del Hekima College (Kenia) viven el problema en comunidad y cómo una granja agrícola de Zambia demuestra que es posible lograr abundantes cosechas respetando la naturaleza. Desde América se presente un libro de texto online sobre los grandes desafíos ecológicos desde una perspectiva integral, científica, espiritual y ética, basada en la espiritualidad ignaciana.
La contribución de Asia es abundante. Desde la experiencia de los «amigos de los árboles» en la India, hasta la defensa del río Mekong en Camboya, la defensa de la isla de Jesu en Corea, que ha llevado a la cárcel a un jesuita y la experiencia de los jesuitas de Asia-Pacífico cuya vida transcurre en medio de ciclones y desastres naturales. De Europa el Anuario nos trae una actividad promovida por en una escuela profesional de Portugal en su empeño por promover valores de la justicia social sin disociar la lucha contra la pobreza de los problemas ambientales.