Del 1 al 12 de mayo, el Obispo, Bernardo Álvarez, proseguirá con sus visitas pastorales a las parroquias de la diócesis. En esta ocasión, se hará presente en El Hierro.
En esta isla del meridiano, la visita se ha dividido por zonas parroquiales. Monseñor Álvarez confirmará en la fe a varios grupos, el día 1 en Valverde y en El Mocanal. Ya, los días 2, 3 y 4 el prelado partirá hacia Frontera donde también habrá confirmaciones. Asimismo, el Obispo tendrá la oportunidad de visitar a las autoridades del municipio, así como a los enfermos, a los catequistas y a sus grupos.
Cabe señalar que el día 3, Bernardo Álvarez también estará en la Fiesta de la Cruz, en El Pinar. En este enclave, presidirá la Eucaristía a las 12:00 horas.
El periplo del Obispo continuará en Valverde y El Mocanal los días 5,6 y 7. Concretamente, el domingo 5 de mayo, el prelado celebrará la misa en el Santuario de La Dehesa, a las 17:00 horas. Un día más tarde, comenzará con las visitas a los colegios y a las instituciones de la zona. Por la tarde, presidirá la misa en El Mocanal y el día 7 visitará el hospital y el acuartelamiento de la guardia civil. Además, el prelado podrá conocer, de primera mano, las necesidades e inquietudes de los consejos parroquiales.
En una reciente misiva, Bernardo Álvarez señala: «con la Visita Pastoral, se hace más palpable aún, y se acrecienta, esta unión de todos los fieles en la única Iglesia de Cristo. Mediante la visita del Obispo, ustedes y yo, podremos renovar nuestro encuentro con el Señor, que sigue visitando a su pueblo para salvarlo de todo mal y conducirlo por los caminos del amor y la paz, de la justicia y la santidad. En la diócesis, el Obispo es Vicario de Cristo y su representante principal. Es ‘padre y pastor de los fieles y como tal debe velar por ellos. La visita del Obispo es el ‘signo’ y el ‘instrumento’ mediante el cual Jesucristo, el Buen Pastor, sigue cuidando y guiando a su Iglesia.»
Por su parte, Domingo Miguel González, arcipreste de El Hierro ha indicado que «la visita se ha preparado con mucho ánimo. La gente está muy ilusionada con la idea de que el Obispo venga hasta esta isla y pueda convivir unos días con nosotros. Además, en vísperas de la Bajada de la Virgen. Ha sido una ocasión magnífica para poner a punto la parroquia, para revisarnos y para intentar mejorar» – subrayó González.