El municipio natal del primer santo Canario, acogió este domingo, la fiesta en honor del primer santo canario, el Hermano Pedro. El Vicario General, Antonio Pérez, presidió la eucaristía.
La parroquia de Vilaflor acogió este domingo la celebración de la fiesta en honor del Santo Hermano Pedro. A las cinco de la tarde el Vicario General presidía la Eucaristía en la que estaban presentes, junto a numerosos fieles, el presidente del Cabildo, el alcalde de Vilaflor, además de otros alcaldes y miembros de las corporaciones sureñas en las que el primer santo canario es alcalde honorario. También participó en la Eucaristía la cónsul de Guatemala.
En su homilía, Antonio Pérez, parafraseando al Papa Benedicto XVI y a la luz de la vida del Hermano Pedro y del momento presente se preguntaba: «Dónde encontar la fuerza que nos motive, y sea capaz de inducir a las personas y a los grupos sociales a afrontar los retos y desafíos actuales. ¿Dónde está la luz que pueda iluminar nuestro conocimiento, no sólo con ideas generales, sino con imperativos concretos? ¿Dónde está la fuerza que lleva hacia lo alto nuestra voluntad? ¿Cómo anunciar el Evangelio. ¿De qué manera la fe, en cuanto fuerza viva y vital, puede llegar a ser hoy realidad» En este sentido invitaba a todos a tener una fe grande, adulta como la de Pedro de S. José Betancurt, que beba en la contemplación de los misterios de la encarnación, la eucaristía y la cruz. Una fe- dijo- «que también en nosotros ha de transformarse en obras de caridad, en compromiso por construir la civilización del amor, en esfuerzo por cumplir bien con las responsabilidades cotidianas de cada uno».
Después de la Eucaristía se realizó la procesión con la imagen del Santo. Por último, señalar que tras estos actos se procedió a la inauguración y bendición de la plaza central del municipio que está dedicada al obispo Domingo Pérez Cáceres.
