
La Bajada de la Virgen de Guadalupe en La Gomera llega a su fin. Este sábado 16 de diciembre está previsto que la patrona de la isla colombina regrese a su ermita de Puntallana. A las 13:00 horas se celebrará la Eucaristía en la parroquia de la Asunción, en San Sebastián de La Gomera, presidida por el obispo, con acción de gracias y ofrenda de la Policía Local, Protección Civil y AEA.
Posteriormente, a las 14:00 horas comenzará la procesión hasta el muelle y seguidamente se iniciará el retorno de Nuestra Señora de Guadalupe a su ermita.
Antonio Ávila, misionero claretiano que ha desarrollado en La Gomera diferentes iniciativas de animación misionera, ha hecho balance de esta cita pastoral. “Esta Bajada ha sido como un auténtico Adviento. Es la Virgen la que ha venido para traernos a su hijo y nosotros, como si fuéramos pastores, lo hemos reconocido. Me ha sorprendido ver tanta gente que se ha ido acercando para acompañarla, para hacerle regalos, para orar…Realmente, creo que ha merecido la pena el esfuerzo realizado”.
Ávila añadió que ahora hay que seguir cuidando algunos aspectos de la fe para que esta Bajada dé aún más frutos. “Para que el Señor siga viviendo en nuestro corazón lo que habría que cultivar con mayor fuerza es la oración personal. También, la participación en los sacramentos porque, a fin de cuentas, el crecimiento de la fe es una obra que hace Dios. Nuestro papel es simplemente, como María, decirle que sí y ponernos en sus manos”.
Por su parte, el arcipreste de La Gomera y párroco de la Asunción, Juan Ramos, ha destacado la «emoción» que sienten los fieles al despedirse de la imagen de la Virgen: «Muchos dicen que no la volverán a ver en vida en este lustro», ya que la próxima Bajada tendrá lugar en 2028. «Para el que tiene fe, mirar una imagen que tiene tanto significado es algo muy grande, porque les lleva a la Virgen que está en el Cielo; cuando rezamos ante ella, se nos conmueve el alma».
A las puertas de la Navidad, Juan Ramos ha pedido a las familias gomeras que, a través de la imagen de la Virgen de Guadalupe, «abran su corazón a su Hijo Jesucristo. Una familia donde entra el Señor es una familia que prospera y avanza». En cuanto a su deseo personal, «por encima de todo, la paz».