En el año 2000 el San Juan Pablo II llamó «Centinelas de la mañana» a los jóvenes del nuevo milenio, dándoles el encargo de despertar a toda la Iglesia a la evangelización: «¡Si sois lo que debéis ser, llevaréis el fuego a todo el mundo!».
Para ayudar en esta tarea, el pasado fin de semana, tuvo lugar en nuestra Diócesis el Curso Base de Evangelización impartido por Andrea Brugnoli y Chiara Facci, coordinadores y promotores del Proyecto Centinelas de la Mañana extendido por más de 120 diócesis. Dirigido a jóvenes de entre 20 y 35 años, quiere ser una herramienta para llevar adelante esa invitación del Papa, haciendo de cada joven un evangelizador, despertando el bautismo para despertar a otros bautizados y llevarlos al encuentro con Jesús.
Convocados por las Delegaciones de Nueva Evangelización y Catequesis, en torno a medio centenar de jóvenes de distintos puntos de la geografía diocesana y de diversas realidades eclesiales, se dieron cita para orar juntos, formarse y capacitarse. Ahora toca ir vertebrando este método de formación de jóvenes evangelizadores que sean fermento en cada parroquia y realidad eclesial.
Lo próximo será comenzar a organizar posiblemente durante el mes de octubre, la iniciativa «Una luz en la noche», unida a este método. Elegido el día y el lugar, tras una tarde de encuentro, formación y preparación de lo necesario con quienes deseen participar en la experiencia, en torno a las 22:00 horas se abre un templo céntrico al lugar donde se mueven los jóvenes en el que está expuesto el Santísimo. Luego, por parejas, los jóvenes centinelas salen a la calle e invitan a otros jóvenes a encontrarse con Jesús que los espera en el templo. Sin duda, una experiencia que ayudará a quienes participen en ella a dar razón de su fe y a compartir con otros la alegría del Evangelio.