La Congregación para las causas de los Santos ha remitido al arzobispo de Sevilla una carta en la que comunica el nihil obstat preceptivo de la Santa Sede para la causa de beatificación y canonización de 21 mártires sevillanos del siglo XX.
La misiva está firmada por el prefecto de la Congregación, el cardenal Angelo Amato; y el secretario, mons. Marcelo Bartolucci.
El proceso diocesano se abrió en la Archidiócesis de Sevilla el pasado 3 de octubre, concretamente con un acto que presidió mons. Asenjo en la Capilla Real de la Catedral. Ese día se dio a conocer la relación de mártires y se tomó juramento a todas las personas que intervienen en la fase diocesana.
Primera etapa del proceso
El proceso de canonización consta de cuatro etapas. La primera de ellas conduce a la calificación de siervo de Dios de la persona cuya causa se ha iniciado. El obispo diocesano y el postulador de la causa piden iniciar el proceso de canonización, y para ello presentan a la Santa Sede un informe sobre la vida y las virtudes de la persona. La Santa Sede, por medio de la Congregación para las Causas de los Santos, examina el informe y dicta el decreto diciendo que nada impide iniciar la Causa (Decreto Nihil obstat). Este decreto es la respuesta oficial de la Santa Sede a las autoridades diocesanas que han pedido iniciar el proceso canónico. Obtenido el Nihil obstat, el obispo diocesano dicta el decreto de introducción de la causa del ahora siervo de Dios.
