El arzobispo de Valladolid y presidente de la Conferencia Episcopal Española, Monseñor Luis Javier Argüello, ha sido el encargado de dictar la segunda ponencia del Congreso Internacional de Hermandades bajo la advocación de la Esperanza, organizado por la Hermandad de la Esperanza de Triana.
La cita ha sido en el salón de actos de la Facultad de Teología San Isidoro de Sevilla, donde los congresistas han disfrutado de la disertación del arzobispo vallisoletano bajo el título ‘Hagamos de la vida un camino de esperanza’, en la que monseñor Argüello ha desgranado las particularidades de vivir «peregrinando en esperanza».
El título de la ponencia «es una invitación, un imperativo, expresión activa y en movimiento de lo que somos como bautizados», ha explicado el arzobispo de Valladolid. «El camino de un cristiano tiene un manantial permanente: Jesucristo- continuaba monseñor Argüello- y en la medida que acogemos la gracia de Dios en nuestra vida, esta gracia se convierte en virtud y se vive en fe, esperanza y caridad». Y centrándose en la virtud de la esperanza, ha afirmado que «la esperanza es camino, verdad y vida. El camino de esperanza es camino de plenitud, pues en la meta está Jesuscristo».
«María es el icono de la esperanza en medio de las vicisitudes del Mundo», continuaba el presidente de la Conferencia Episcopal Española. «Ella es la respuesta a la pregunta de quién es la Iglesia, un pueblo que dice como María ‘hágase en mí’. «Hemos de mirar a María, Virgen y Madre de la Esperanza, para decir como Ella ‘Hágase en mí’. Abramos nuestro corazón a la acción de Dios».
«La plenitud de la vida en esperanza es la santidad»
«El corazón de la esperanza es la posibilidad que tenemos de vivir en Dios, de vivir los acontecimientos, los proyectos, desde Dios», ha afirmado monseñor Argüello, quien remarcaba que la vida cristiana nos sitúa de una manera nueva en la historia: «No es circular ni tampoco lineal, porque el desarrollo no es inevitable; la vida, por lo tanto, es un coloquio con Dios para vivir el tiempo, la historia y los acontecimientos como una oportunidad».
«Cada día está lleno de oportunidades de ser santos, -explicaba don Luis Javier.- En las relaciones con los demás, en la manera de vivir los acontecimientos, en la manera de acercarnos a las personas que gritan su necesidad o en dar pasos adelante en nuestra conversión…. La plenitud de la vida en esperanza es la santidad».
Para finalizar su ponencia, invitaba a los presentes a «pisar las huellas de Jesucristo «dejémonos llevar de la mano de María, y digamos como Ella: ‘Hágase en mí’, para que nuestro corazón ensanchado sea germen, signo e instrumento de esperanza para las personas que nos rodean».
«El ancla de la esperanza nos mantiene firmes y nos invita a dar pasos hacia el otro»
Tras la conferencia, monseñor Argüello ha podido visitar la Capilla de los Marineros y rezar ante la imagen del Santísimo Cristo de las Tres Caídas, titular cristífero de la hermandad de la Esperanza, que durante estos días de misión preside el altar mayor del templo de la calle Pureza.
Posteriormente, el arzobispo vallisoletano presidió la Eucaristía en la Parroquia de San Pío X, en el Polígono Sur, concelebrada por Manuel Soria, director espiritual de la corporación trianera, y Salvador Diánez, párroco de San Pío X.
Durante su homilía, monseñor Argüello expresó que María, Ntra. Sra. de la Esperanza, quiere hacer suyas nuestras lágrimas para ofrecernos la esperanza que lleva en su corazón, que es fruto de nuestra alegría. «En medio de las aguas agitadas que navegamos, María de la Esperanza nos ofrece no un pilar, sino un ancla, que nos mantiene firmes y seguros en la fe, pero nos invita a navegar y a dar pasos hacia el otro». Haciendo alusión a la exhortación escrita por el papa León (Dilexit Te/ Te he amado), el arzobispo ha recordado que lo que da seguridad en nuestra vida es saber que Dios que ha dado la vida por nosotros, nos ama y nos ha ofrecido a María como nuestra Madre. «Si por la fe estamos seguros por la esperanza, seamos constantes en el amor. Estamos llamados a anunciar el Evangelio a los más pobres y a aquellos que sientan debilidad o fragilidad, del tipo que sea».
El congreso finalizará mañana con la celebración de la Eucaristía en la Parroquia Jesús Obrero, donde será trasladada previamente en Rosario matutino la imagen de Ntra. Sra. de la Esperanza.
The post Monseñor Luis Argüello: «El corazón de la esperanza es la posibilidad que tenemos de vivir en Dios, desde Dios» first appeared on Archidiócesis de Sevilla.