El próximo sábado tendrá lugar en la Catedral de Sevilla el acto de despedida de monseñor Asenjo Pelegrina de la Archidiócesis a la que ha servido en los últimos doce años. Esta mañana, el actual Administrador apostólico se ha reunido con los trabajadores de la Curia diocesana en el salón de los cuadros del Arzobispado, en un sencillo y emotivo acto que ha servido para evidenciar el cariño que el personal de la Archidiócesis dispensa a un “servo servorum Dei, el servidor de los siervos de Dios”, como ha querido don Juan José que se le recuerde tras su paso por la sede de San Isidoro y san Leandro, cuyos retratos presiden un ala de la estancia en la que se ha celebrado este último encuentro comunitario entre la Curia y su pastor.
Al comienzo del mismo tomó la palabra Isacio Siguero, secretario general y canciller, que aludió a san Pedro para afirmar que “don Juan José pasó haciendo el bien”. En esta línea, recordó su llegada a Sevilla, una diócesis “que poco a poco ha ido conquistando, a base de cariño y templanza”, y de la que monseñor Asenjo “ya forma parte de forma indisoluble”.
“Hemos tenido la suerte, mejor dicho, la gracia, de estar muy cerca de usted durante estos doce años. Hemos gozado de su confianza, que agradecemos profundamente, y son muchos, innumerables, los recuerdos de los momentos vividos junto a usted”, ha destacado Siguero en su alocución. Más adelante ha señalado que “damos fe de lo que hemos visto y oído, y podemos decir que don Juan José es siempre el mismo, desde que llegó hasta el día de hoy: es el mismo hombre sencillo, humilde, sincero y transparente, dentro y fuera del Arzobispado, en la celebraciones multitudinarias y en las distancias cortas”, ha añadido. Además, ha destacado la “vasta cultura” y su “inquebrantable fidelidad a la doctrina de la Iglesia”, así como “su entrega y dedicación a esta Iglesia hispalense que amamos y de la que formamos parte”.
Capítulo especial para los duros momentos vividos como consecuencia de su reciente enfermedad: “Ha sido conmovedor, para quienes hemos estado a su lado, ver cómo se ha abrazado a la cruz y no ha dejado ni un solo instante de pastorear a su pueblo, olvidándose de sí y pensando en nosotros”, ha subrayado el secretario general. Al respecto, monseñor Asenjo ha reconocido la gravedad de las dolencias que ha sufrido en la vista, y que han condicionado de alguna forma sus últimos meses en Sevilla. Ha reiterado que después del 12 de junio, fecha en la que tomará posesión de la sede monseñor Saiz Meneses, estará a disposición del nuevo arzobispo y de todo el que quiera en su nueva residencia de la capital hispalense.
“Amo a Sevilla, llevo a Sevilla en el corazón”
En un breve discurso ante los trabajadores de las Curia, monseñor Asenjo ha afirmado que “amo a Sevilla, llevo a Sevilla en el corazón”, y se ha mostrado agradecido “a los de casa”, en referencia a las personas que trabajan desde la Curia por la Iglesia en Sevilla. les ha pedido que traten a su sucesor con el mismo empeño y dedicación que han demostrado en los últimos doce años, y ha afirmado que “Sevilla tiene mucha suerte con el arzobispo que ha nombrado el Papa”.
Galería fotográfica del acto.
