La Iglesia Española celebra este año el 50 aniversario de la creación del departamento de Pastoral de la Carretera, inserta en la Comisión Episcopal de Migraciones. Se trata de una conmemoración que ha marcado la Jornada de Responsabilidad en el Tráfico 2018, que se celebrará el próximo 1 de julio, fiesta de San Cristóbal, patrono de los conductores. Para recordar esta efeméride se ha elegido el lema ‘Y sabed que yo estoy con vosotros todos los días (Mt 28, 21)’.
El presidente del este departamento, monseñor José Sánchez González, ha dedicado parte del Mensaje para la jornada a recordar la trayectoria de esta Pastoral. Pero también ha señalado que “quizá no venga mal recordar la gravedad y las consecuencias de los accidentes viales y la serie de inconvenientes y perjuicios -muy difíciles de soportar- que acarrean a nuestra sociedad”. “Los centenares de personas que mueren o quedan inválidas anualmente en nuestro entorno -continúa- constituyen un problema dramático que afecta a toda la sociedad”. Por eso, “invitamos a todos los ciudadanos, peatones y conductores de cualquier vehículo, a la responsabilidad en el tráfico, pues, como dice el papa Francisco: para incrementar la seguridad no bastan las sanciones, sino que se necesita una acción educativa que conciencie más sobre las responsabilidades que se tienen sobre quienes viajan al lado”.
La Pastoral de la Carretera en Sevilla
La Archidiócesis hispalense cuenta también con su filial de esta pastoral, cuyo secretario es José María Romero. Este policía local contactó hace cuatro años con el departamento de Pastoral de la Carretera de la CEE. Entonces le invitaron a dar una conferencia sobre educación vial –tarea que desarrollaba a menudo en su profesión- y así comenzó su apostolado en este ámbito. Según Romero, esta pastoral es fundamental “porque donde más tiempo pasamos es en la vía pública y todos, de una manera u otra, somos usuarios de ésta –como viandantes, conductores, ciclistas, taxistas, repartidores…” Por ello, “es importante iluminar desde la fe estos itinerarios, porque verdaderamente la gente cambia cuando se pone al volante”.
Además de sumarse a las campañas nacionales, tanto a la de Responsabilidad en el Tráfico (a principios de julio) como a la Jornada de las lágrimas (en el mes de mayo) en la que se recuerda a las víctimas, próximamente esta pastoral pondrá en marcha un programa de acompañamiento “desde una perspectiva cristiana” a personas que han sufrido un accidente de tráfico. Igualmente, se ofrecerán talleres y charlas formativas sobre seguridad vial y sobre ecología integral, es decir, “enseñar a desplazarnos contaminando lo menos posible y sin dañar nuestro entorno”. Por último, se está estudiando la posibilidad de organizar encuentros o celebrar Eucaristías con colectivos del sector (camioneros, taxistas, etc.) “para que entiendan que la Iglesia se preocupa por ellos y que vean a la luz de la fe la responsabilidad que tienen al volante”. En definitiva, Romero busca concienciar desde la Pastoral de la Carretera de que es nuestro deber, no sólo como ciudadanos sino también como cristianos, “hacer de nuestras vías espacios más humanizados y transitables”.
En el siguiente enlace se pueden descargar los materiales para la Jornada de la Responsabilidad en el Tráfico 2018
